Qué tan buena es "Tron: Ares", la película de Jared Leto que revive la saga de ciencia ficción

Tras años de idas y vueltas, la franquicia se renueva con esta tercera entrega dirigida por Joachim Rønning.

Vuelve una de las franquicias más particulares de Disney. Escrita y dirigida por Steven Lisberger, la historia de Tron comenzó en 1982, una película bastante avanzada para la época, ya que ahondaba en el universo digital y en el mundo de los videojuegos, hecho por el cual se convirtió en un clásico de culto. Su secuela, Tron: Legacy (2010) llegó casi tres décadas después para reforzar la devoción de su pequeño, pero fiel, grupo de fans. Ahora, 15 años más tarde, llega Tron: Ares, que busca renovar a la saga con una continuación centrada en el universo, pero totalmente independiente de sus obras anteriores.

La trama se centra en Ares (Jared Leto), un programa informático muy avanzado que es enviado desde el mundo digital al mundo real para una arriesgada misión. Su llegada marcará el primer contacto de la humanidad con seres creados por inteligencia artificial, por lo que deberá desafiar no solo los límites tecnológicos conocidos hasta la fecha, sino también los éticos. Es por eso que Ares deberá navegar por un entorno desconocido y poner a prueba su capacidad de adaptación y el impacto que su existencia puede llegar a tener en la sociedad humana.

Tron: Ares elenco
Jared Leto y Greta Lee encabezan el elenco como Ares y Eve Kim.

Jared Leto y Greta Lee encabezan el elenco como Ares y Eve Kim.

Si bien Tron y Tron: Legacy siempre fueron parte de un nicho que nunca logró volverse verdaderamente mainstream, ambas películas tenían algo que las volvía únicas. La primera fue bastante innovadora y la segunda tuvo una narrativa más atractiva. En cambio, Tron: Ares carece de ese diferencial porque no innova ni emociona del mismo modo.

En gran parte, el problema de esta tercera entrega es que llegó demasiado tarde. En principio, porque aterrizó 15 años después de su antecesora. Pero lo más importante a tener en cuenta es que el proyecto plantea una historia en el que los seres humanos toman contacto por primera vez con la inteligencia artificial. Y eso, en pleno 2025, ya es algo viejo. Además, tiene un guion flojo (a cargo de Jesse Wigutow) que carece de tensión, adrenalina y emoción.

Esta tercera entrega atravesó varios problemas desde que se anunció. Desde 2010, el proyecto atravesó más de una década de reescrituras, cancelaciones y cambios de dirección. Incluso llegó a tener luz verde en 2015, pero luego fue descartada por Disney por el fracaso de Tomorrowland (2015). Fue recién en 2023 cuando retomaron el proyecto, con Jared Leto al frente y Joachim Rønning como director. El rodaje tenía que comenzar ese año, pero la producción se detuvo por las huelgas de guionistas y actores en Hollywood, pausa que obligó a suspender indefinidamente el proyecto. Todo esto retrasó el estreno varios años.

En cuanto al elenco, Jared Leto y Greta Lee cumplen bastante con sus roles, pero no sobresalen del todo. Evan Peters y Gillian Anderson, en cambio, quedan bastante desaprovechados (especialmente la última, que tiene una muy breve aparición en pantalla). Lo mismo sucede con el cameo de Kevin Flynn, que apenas suma nostalgia y deja sabor a poco.

Tron: Ares efectos
El verdadero atractivo de Tron: Ares son su banda sonora y efectos visuales, dos aspectos muy elogiados por la crítica especializada.

El verdadero atractivo de Tron: Ares son su banda sonora y efectos visuales, dos aspectos muy elogiados por la crítica especializada.

Pero donde sí se destaca Tron: Ares (y mucho) es en lo visual. Los efectos especiales, a cargo de David Seager, vuelven a la película visualmente deliciosa y hay escenas que se vuelven hipnóticas. Aunque, definitivamente, el gran punto alto es su banda sonora (algo en lo que nunca defrauda) a cargo de Nine Inch Nails, banda integrada por Trent Reznor y Atticus Ross, los encargados de musicalizar éxitos como Challengers (2024), Soul (2020) y The Social Network (2010), entre muchos otros.

En resumen, Tron: Ares es una entrega correcta que expande el universo de la saga, pero que no innova demasiado. Es visualmente buena, tiene una gran música y un homenaje al film original que apela a la nostalgia, pero que a pesar de ello podría terminar siendo la más olvidable de la franquicia. En definitiva, los fanáticos deberán juzgarla por su propia cuenta.

TEMAS RELACIONADOS