Un culturista chino de 74 años, Xinmin Yang, se volvió viral por su increíble físico que lo hace lucir décadas más joven. Para conseguir esta apariencia lleva adelante una rigurosa rutina de entrenamiento y una dieta estricta, combo que fue clave en su vida, y lo llevó a ser un referente en el mundo del fitness. Su historia, compartida recientemente en redes sociales, sigue generando admiración por su disciplina.
Yang comenzó su recorrido en el mundo del culturismo en los años 80, un deporte que en China estuvo prohibido durante algún tiempo. Su constancia lo llevó a convertirse en un ícono, con una rutina diaria de ejercicios que mantuvo durante más de 40 años. Además, su enfoque en una alimentación balanceada, especialmente en el desayuno, fue otro de los pilares de su “juventud eterna”.
El impacto de su filosofía de vida va más allá de su apariencia física. Actualmente, Yang dirige entrenamientos personalizados y promueve el culturismo como una herramienta para alcanzar una vida plena y saludable. Su mensaje resuena con fuerza en las nuevas generaciones, inspirando a más personas a adoptar su estilo de vida.
Cuál es la historia de Xinmin Yang, el hombre de 74 años que tiene un físico de 30
Xinmin Yang inició su camino en el culturismo en 1984, aprovechando la apertura del deporte en China luego de años de prohibición. Desde entonces, se comprometió a entrenar a diario, dedicando décadas a fortalecer su cuerpo y desarrollar una vida sana. Según el propio Yang, el entrenamiento físico constante es el principal responsable de su estado físico comparable al de una persona de 30 años.
Otro factor determinante en su vida fue su dieta. Yang mantuvo durante los últimos 10 años un desayuno compuesto por huevos (consume entre 6 y 8 de forma diaria), tomate, pepino, avena y pechuga de pollo, alimentos que considera esenciales para su energía y rendimiento. Este compromiso con su alimentación juega un papel crucial en su apariencia.
Además de cuidar su propia salud, dedica tiempo a promover el culturismo a través de cursos privados y campamentos de entrenamiento. En sus palabras, el crecimiento de su práctica en China es notable, con un aumento en las competiciones, equipamiento y atletas profesionales. Considera a las nuevas generaciones como el futuro del deporte, y es por eso que se esfuerza en transmitirles su pasión y disciplina.
A pesar de su avanzada edad, Xinmin Yang no planea detenerse. Con la misma determinación que marcó su vida, asegura que continuará entrenando incluso al llegar a los 80 años, consolidándose como un ejemplo de constancia y esfuerzo en el mundo del fitness.