Al igual que los humanos, los gatos pueden sufrir problemas de salud y los problemas oculares, como la conjuntivitis, pueden aparecer en ellos. Es por eso que es importante conocer cómo colocarle gotas a ellos en caso de atravesar este tipo de problemas en la vista.
De todas maneras, no es necesario recurrir a un veterinario ya que lo podrás realizar sin generarle problemas a tu felino siguiendo los pasos que detallaremos a continuación. Con un poco de paciencia y algunas sencillas técnicas podrás aplicarle a tu gato las gotas necesarias para terminar con sus problemas oculares.
Paso a paso: cómo poner gotas en los ojos de tu gato
En primer lugar es importante aprender a sujetar al gato para que se quede quieto a momento de aplicarle las gotas. No será una tarea sencilla y por eso tendrás que transmitirle tranquilidad para no alterarlo. Por eso es mejor tenerlo reposando sobre tus piernas y aparte será una posición más que cómoda para el aplique. Podrás apoyarlo sobre una superficie que esté a la altura de tu cintura y en caso de ser resbaladiza, lo idea es colocar una toalla.
Luego tendrás que sostenerle la cabeza y colocar el dedo pulgar a un lado de la barbilla y los otros al lado. Si notás que tu gato se revuelve y no logra quedarse quieto, tendrás que usar una postura dominante para transmitirle la orden para quedarse quieto.
Una vez logrado, podrás aplicar las gotas. Tendrás que limpiar los ojos para que las gotas sean más eficaces, por lo tanto, utilizá un algodón empapado con esterilizante de ojos para gatos. El paso siguiente será abrirle los párpados para el aplique colocando el gotero a unos 2 cm de distancia, siempre cuidando de no tocar el ojo.
Qué hacer después de haber puesto gotas en los ojos de tu gato
Luego de aplicar las gotas, tendrás que mantener a tu gato quiero para evitar que se frote los ojos. Es fundamental para asegurarse que las gotas se hayan esparcido correctamente para que cumplan su función. Si todo salió bien, premia a tu mascota con una golosina, además, te servirá como método de distracción para no se frote los ojos.