Los hinchas de Racing protagonizaron uno de los recibimientos más increíbles en la historia de La Academia, en el Cilindro de Avellaneda, tras la salida del equipo en un partido histórico por el pase a la final de la Copa Libertadores de América.
Los fanáticos de la Academia reventaron el estadio tras la salida del equipo en un recibimiento a la altura de los acontecimientos: cinco minutos de bengalas, bombas de estruendos y bengalas para un partido histórico.
Los hinchas de Racing protagonizaron uno de los recibimientos más increíbles en la historia de La Academia, en el Cilindro de Avellaneda, tras la salida del equipo en un partido histórico por el pase a la final de la Copa Libertadores de América.
En la previa del partido, el entrenador Gustavo Costas había mandado un mensaje claro a los fanáticos de Racing y había pedido máximo apoyo: “No importa que nos cobren un palo de multa, me chupa un huevo. Tiremos la cancha abajo. Los vamos a pasar por arriba”.
Y los hinchas no fallaron: 50.000 almas deliraron tras la salida del equipo con cinco minutos de bengalas, bombas de estruendos y bengalas para un partido histórico en el estadio Juan Domingo Perón. El trámite no es nada fácil. El equipo de Avellaneda salió a la cancha con la obligación de ganar para soñar con la clasificación a la gran final del 29 de noviembre en el Estadio Monumental de Lima.
La Academia enfrenta un partido histórico ante el Mengao, y buscará dar vuelta la serie tras la derrota por 1-0 en Río de Janeiro, para llegar a la final del certamen internacional por primera vez luego de 58 años. Dirige el árbitro chileno Piero Maza.