La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, realizará este martes la presentación del Operativo Lusitania, un procedimiento internacional por el cual se logró desmantelar una organización narco que intentaba ingresar 500 kilos de cocaína a Europa.
Cuarenta y ocho horas después de una derrota electoral que acapara todos los titulares, la funcionaria brindará una conferencia de prensa en el edificio del Ministerio.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, realizará este martes la presentación del Operativo Lusitania, un procedimiento internacional por el cual se logró desmantelar una organización narco que intentaba ingresar 500 kilos de cocaína a Europa.
Cuarenta y ocho horas después de una derrota electoral que acapara todos los titulares, la funcionaria brindará una conferencia de prensa junto al jefe de la Policía Federal, el comisario general Luis Alejandro Rolle, en la que también participarán autoridades de la Policía Nacional de Perú y de España.
La presentación se realizará desde las 8 en el edificio de la cartera de Seguridad, ubicado en la Avenida Gelly y Obes 2289, en el barrio porteño de Recoleta.
Desde la cartera que dirige Bullrich no se brindaron más detalles sobre el operativo que implicó varias detenciones en Argentina y en la Península Ibérica.
La Embajada de Rusia desmintió la acusación del Gobierno de que ese país está relacionado con la filtración de los audios de la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y advirtió que las acusaciones son "infundadas y falsas". Además, marcó que "no se han aportado ningunas pruebas al respecto".
Patricia Bullrich había denunciado "un servicio de inteligencia paralelo" y mencionó a Rusia y Venezuela. En tanto, en un comunicado, la Embajada de Rusia le respondió a la ministra de Seguridad: "Lamentamos observar que en el contexto de otro escándalo político interno de gran repercusión mediática nuestro país vuelve a ser mencionado de forma negativa".
"Se han expresado públicamente algunas suposiciones sobre la posible grabación de conversaciones telefónicas en Casa Rosada por servicios de inteligencia rusos (y venezolanos), supuestamente con el objetivo de desestabilizar al Gobierno. No se han aportado ningunas pruebas al respecto", advirtió en esta línea.