Rodolfo Aguiar, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), confirmó este martes que en las próximas horas el gremio anunciará un paro general para el próximo 7 de agosto contra el ajuste de Javier Milei. El dirigente expresó que será con una movilización multisectorial. "El Gobierno está fracasando bajo sus propias premisas", sostuvo.
"El cierre de organismos públicos no es solo un ataque a los estatales, sino a toda la sociedad. La gente empieza a tomar conciencia de que los ataques no son a la casta; acumulan altos sueldos en el Estado", añadió el secretario en diálogo con Radio Splendid .
Aguiar remarcó que "la Ley Bases y el DNU recrudecieron la crisis económica", ya que según los índices actuales "hay 27 millones de personas en la pobreza y otros 27 en la indigencia", por lo que llamó a una movilización multisectorial para "salir a defender nuestros derechos. Este atropello que estamos sufriendo solo significa más desempleo, sin seguridad social ni dignidad. La reforma que pretende Milei es un ataque a los derechos humanos y a la seguridad social".
Tras el primer semestre de gobierno de Javier Milei, el 30% de las empresas prevén que habrá más despidos
En el período 2023-2024 en Argentina aumentó de manera significativa las tasas de indigencia y pobreza por ingreso, con una caída del poder adquisitivo en todos los estratos, pero en los más bajos mucho más en términos absolutos y relativos. Estos datos alarmantes se desprenden de las conclusiones de un informe de la Universidad Católica Argentina, que toma datos del Indec sobre la Evolución de la Distribución del Ingreso.
En un informe llamado "Un final anunciado: más pobres, pobres más pobres y más desiguales ¿Marcas del pasado o más futuro por venir?”, el Observatorio de la Deuda Social de la facultad da cuenta de "una crisis sistémica" de la política-económica del país y no hay evidencias de un giro o cambio significativo en el rumbo en el devenir social.
La profunda caída del bienestar económico y la distribución regresiva de los ingresos se da en el marco de un ciclo largo de agotamiento del modelo de posconvertibilidad, luego de varios años de acumulación de políticas fallidas y desequilibrios sistémicos, pandemia de por medio, y de un último año de crisis contenida, devinieron políticas de ajustes correctivas, brutales, aunque inevitables.
Tantos los ingresos de los ocupados como el de los asalariados, perdieron en promedio, alrededor de un 20% real en el primer trimestre del año, en comparación al mismo periodo del año pasado.
En el segmento de los ocupados, el estrato más pobre perdió 24,4% en el periodo del primer trimestre, el medio, 23,1% y el alto, 12,2%. Entre los asalariados, la dinámica es similar: el estrato más bajo vio un retroceso en sus ingresos de 24,9%; mientras que el medio, 22,6% y el alto, 15,1%.
En cuanto a la evolución de las tasas de indigencia, se estima que habría aumentado de 8,8% a 19,8%. Mientras que la tasa de pobreza habría pasado de 38,8% a 54,6%.