Viajar a Córdoba: el pueblito que tiene una laguna, río y un monasterio benedictino

En el Valle de Calamuchita, este lugar guarda paisajes serranos, río, una laguna y la historia del Monasterio Nuestra Señora de la Paz.

Hay destinos en la provincia de Córdoba que parecen resistirse al paso del tiempo. Pequeños pueblos, escondidos entre sierras y caminos de tierra, ideales para aquellos que prefieren hacer turismo en lugares que no sean masivos.

En esos parajes, el sonido del agua de los ríos se confunde con el canto de los pájaros, y la siesta sigue marcando el ritmo de la jornada. Son lugares que no suelen estar en los folletos turísticos más difundidos, pero que sorprenden a quienes se animan a desviarse de la ruta principal.

Uno de esos rincones es Calmayo, una comuna de Calamuchita que combina río, laguna y un monasterio benedictino que todavía guarda historias y leyendas.

calmayo-cordoba-turismo-2

Dónde queda Calmayo

Calmayo se encuentra en el departamento Calamuchita, a unos 87 kilómetros de la ciudad de Córdoba y a 16 kilómetros de Santa Rosa de Calamuchita. Para llegar hasta allí primero hay que tomar la Ruta Nacional 36 hasta San Agustín y luego desviarse unos 13 a 14 kilómetros por camino de ripio. El trayecto es parte de la experiencia: mientras el pavimento queda atrás, los cerros se abren paso y los árboles van ganando terreno.

El pueblo está emplazado a unos 1.600 metros sobre el nivel del mar, lo que le da un entorno serrano privilegiado. Ese mismo camino suele ser escenario del Rally Mundial y es también muy transitado por ciclistas que buscan entrenar entre curvas y subidas exigentes.

Qué puedo hacer en Calmayo

La vida en Calmayo se mueve a otro ritmo. El río Soconcho atraviesa el pueblo y es el lugar elegido para refrescarse en verano. Sus márgenes tienen arboledas antiguas, mesas y asadores que invitan a pasar la tarde sin apuro. También hay un sendero que sigue el cauce hasta un mirador natural desde donde se obtiene una de las mejores postales del valle.

Uno de los atractivos más visitados es el Monasterio Nuestra Señora de la Paz, abierto de miércoles a domingos entre las 10 y las 17 horas. Fundado en 1976 y terminado en la década del 90, los monjes que lo habitaron se dedicaban a la restauración de libros antiguos y a la vida de oración. Hoy el convento está a cargo de una familia que cuida las instalaciones y recibe a visitantes y peregrinos de todas las religiones. En la pequeña capilla aún se conserva la atmósfera de recogimiento, con historias de cantos gregorianos y celebraciones en el Cerro de la Cruz.

Entre las anécdotas que circulan está la de Guillermina Gangoitti, una ermitaña que decidió vivir en una diminuta construcción de dos por dos metros sobre una formación rocosa cercana al monasterio. Allí recibía a curiosos con un té y una charla, en un gesto tan simple como inolvidable.

calmayo-cordoba-turismo

Cómo llegar a Calmayo

Desde la ciudad de Córdoba hay que tomar la Ruta Nacional 36 hacia el sur hasta la localidad de San Agustín. Desde allí, un desvío conduce por un camino de tierra bien mantenido que se extiende unos 13 o 14 kilómetros. El acceso no es complicado y, aunque el ripio puede frenar a los desprevenidos, forma parte del encanto de llegar a un sitio que no se llena de visitantes en temporada alta.

Otra alternativa es salir desde Santa Rosa de Calamuchita y enlazar caminos rurales hasta empalmar con la entrada a Calmayo.

Embed

TEMAS RELACIONADOS