El escritor y creativo estadounidense Jackson Greathouse Fall se propuso un desafío tan simple como ambicioso: le pidió a ChatGPT que lo ayudara a convertirse en millonario partiendo de un presupuesto inicial de apenas 100 euros. La respuesta de la inteligencia artificial no solo lo sorprendió, sino que le permitió, en cuestión de horas, multiplicar su dinero más de diez veces. En el primer día de prueba, ya había generado 1.280 euros, marcando el inicio de una experiencia que pronto se volvió viral.
Para lograrlo, formuló una consigna concreta: quería hacer crecer su capital de forma legal, sin vender productos físicos ni hacer manualidades. ChatGPT le propuso lanzar un sitio web de marketing de afiliados, centrado en artículos ecológicos y sostenibles. Jackson aceptó el reto y se convirtió en el ejecutor humano del plan, cumpliendo cada uno de los pasos que la herramienta le iba indicando.
La estrategia fue clara: compró un dominio, contrató un hosting, diseñó una web orientada a un nicho específico y comenzó a generar contenido optimizado para buscadores. En paralelo, promocionó el sitio en redes sociales. Así, con una mínima inversión inicial y el respaldo de la inteligencia artificial, puso en marcha un proyecto rentable, que hoy está valuado en más de 23.000 euros.
IA personas inteligentes
Jackson Greathouse Fall logró multiplicar su dinero en pocas horas gracias a una estrategia guiada completamente por inteligencia artificial.
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Qué pasó luego de que le pidiera a Chat GPT convertirse en millonario
La estrategia, según detalló en redes sociales, consistió en crear una página de marketing de afiliados orientada a productos ecológicos. Primero invirtió en un dominio y hosting, luego generó contenido optimizado y, finalmente, impulsó la visibilidad con publicidad en redes y SEO. Todo siguiendo los pasos indicados por el asistente de IA.
A menos de una semana del inicio, el negocio ya se proyectaba con futuro. Hoy, el sitio creado por Greathouse Fall está valuado en más de 23.000 euros, demostrando que una inversión inicial modesta puede convertirse en una oportunidad si se articula con herramientas innovadoras. “Estoy a punto de ser rico”, expresó el joven, resumiendo con entusiasmo su experiencia.
Chat GPT
Un escritor usó inteligencia artificial para lanzar un sitio web con productos ecológicos y su inversión inicial se disparó.
El crecimiento de esta aplicación, considerada una de las más veloces en adopción global, no está exento de críticas. Sin embargo, casos como este refuerzan la idea de que, con un uso responsable y creativo, la inteligencia artificial puede ofrecer soluciones reales a problemas concretos.