Represión en el Congreso: el crudo testimonio de los socorristas que atendieron a los afectados

Integran el Cuerpo de Evaluación y Primeros Auxilios, una ONG de asistencia humanitaria que brinda ayuda de manera gratuita hace 22 años en el país y estuvieron presentes en la marcha de los jubilados. "Atendimos a una chica con un disparo en el cuello", revelaron.

La brutal represión desatada en las afueras del Congreso durante la marcha de los jubilados contra el veto de Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria dejó el saldo de varias personas heridas las cuales fueron asistidas por socorristas que integran el Cuerpo de Evaluación y Primeros Auxilios (CEPA). “Atendimos a una chica con un disparo en el cuello”, aseguraron en C5N.

La ONG tuvo su origen en la ciudad de Puerto Madryn, cuenta con 12 filiales nacionales, 3 internacionales y brinda asistencia hace 22 años en el país. "Lo que estábamos haciendo ayer era eso: asistir a toda persona que lo necesite", explicó Marisa, una de las socorristas, en una entrevista con Juan Amorín en el programa La Mañana.

Represión congreso reforma jubilatoria
La represión contra los jubilados fue llevada a cabo por las fuerzas de seguridad.

La represión contra los jubilados fue llevada a cabo por las fuerzas de seguridad.

Sobre el inicio de los acontecimientos, uno de los socorristas presentes en el Congreso explicó que “después de la votación la gente comenzó a cantar, se tiraron las vallas y empezó lo que vimos todos: una represión".

En referencia a los elementos utilizados por las fuerzas de seguridad para llevar a cabo la represión fueron “gases, spray y balas de goma”. “Fue un desborde general donde hubo botellazos, palos todo y nosotros atendemos a toda persona que lo necesite y hemos hecho literalmente eso”, explicaron.

Juan, otro de los socorristas de CEPA, reveló sobre el final que “cuando vamos a la marcha nos concentramos exclusivamente a en atender a las personas”.

El desgarrador testimonio de una enfermera víctima de la represión en el Congreso: "Basta de odio"

En medio de la represión afuera del Congreso, después que la Cámara de Diputados ratificara el veto del presidente Javier Milei al aumento jubilatorio, una mujer se tiró al piso para evitar que las fuerzas de seguridad avanzaran sobre la gente. Exigió ante las fuerzas policiales "basta de odio".

La mujer, de nombre Laura, es una enfermera autoconvocada que explicó: "Vine en el 111, trabajo en el Hospital Belgrano de 13 a 21 horas, en el área del triage de adultos, y es triste ver las necesidades que pasan a diario". Laura se desempeña en el centro de salud del partido de San Martín, y definió: "La gente está mal, ya basta de odio, amen un poquito el país, como la gente humilde, como nosotros que amamos el país".

La trabajadora pertenece al Senaf, la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, ahora bajo la órbita de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, y hace 10 años brinda servicios en el Hogar San José, en la Ciudad, adonde llegan adultos en estado de vulnerabilidad: "Cuando Néstor (Kirchner) llegó al Hogar estaba destruído, pero ni los militares lo cerraron. En diciembre despidieron a dos administrativos y a un enfermero".

En pandemia fue derivada al Hospital zonal Gral. Agudos de San Martín, y reconoce: "me sirvió trabajar con adultos mayores". Además, definió que es parte del 44% que no votó a Milei, a la vez que aseguró que si había que hacer cambios "no era de esta forma ni contra los viejos".

TEMAS RELACIONADOS
DEJA TU COMENTARIO: