El Día de Todos los Santos es una festividad de la Iglesia Católica que se celebra anualmente el 1° de noviembre para conmemorar y honrar a todas las personas que alcanzaron la santidad.
La fecha religiosa se ubica después de Halloween y antes del 2 de noviembre, el Día de los Fieles Difuntos, para orar por las almas que aún están en el purgatorio.
El Día de Todos los Santos es una festividad de la Iglesia Católica que se celebra anualmente el 1° de noviembre para conmemorar y honrar a todas las personas que alcanzaron la santidad.
Esta fecha se ubica entre la festividad pagana de Halloween, que significa Víspera de Todos los Santos, el 31 de octubre, y el Día de los Fieles Difuntos, el 2 de noviembre, que está dedicado a orar por las almas que aún están en el purgatorio, y con el que a menudo se confunde.
Se trata de una fiesta religiosa cuya fecha actual puede rastrearse hasta el papado de Gregorio III (731-741), que un 1° de noviembre dedicó a todos los santos y mártires una capilla en la Basílica de San Pedro de Roma.
Para el católicos practicante es un Día Santo de Obligación, fecha en la que se debe ir a misa, y en muchos países es un día feriado que sirve para la reflexión y el recuerdo de la herencia cristiana. La festividad incluye tanto a los santos y beatos canonizados oficialmente, como a aquellos mártires y fieles difuntos cuya santidad solo es conocida por Dios.