Veinte gendarmes y nueve civiles fueron detenidos en el marco de la investigación sobre una "pyme de coimas" que operaba en dos puestos de control ruteros ubicados en Salta y Tucumán, cada uno de los cuales recaudaba cerca de un millón de pesos por día.
"Son los puestos de El Naranjo, en Salta, y Trancas, en Tucumán, donde los gendarmes pagaban hasta $400.000 a sus jefes para ir a prestar funciones en ese lugar", explicó el periodista Diego Gabriele en Mañanas Argentinas por C5N. La investigación se inició por la denuncia de comerciantes y de un gendarme arrepentido.
Mediante un trabajo conjunto entre la Unidad Fiscal de Salta y la Fiscalía Federal N°2 de Tucumán, se comprobó que los efectivos cobraban coimas a los comerciantes que volvían de comprar mercadería en Bolivia. En el caso de los colectivos de los tours de compras, el pago se hacía por adelantado y mediante transferencia.
"En los allanamientos encontraron $46 millones en efectivo ocultos en mochilas de inodoros, falsos techos, bolsos y estuches, toda plata de muy baja denominación", señaló Gabriele. También se investiga si esta "pyme" operaba en puestos de control de Santiago del Estero.
Entre los gendarmes detenidos hay 12 tucumanos, de los cuales aún no se definió su situación procesal, y ocho salteños que fueron procesados por los delitos de asociación ilícita en concurso real con exacciones ilegales y por ser cometido en provecho propio.