La búsqueda de Nicolás Tomás Duarte, el adolescente de 18 años que desapareció el sábado en Ezeiza, se centra este martes en el arroyo Aguirre de la localidad de Tristán Suárez, donde los investigadores creen que pudo haber caído en medio de la tormenta que afectó el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
El joven fue visto por última vez durante la madrugada del sábado 25, cuando salió del local bailable Egipto Baires Sur, ubicado en el cruce de la Ruta 205 y la calle Sargento Cabral. Desde allí tenía una caminata de 6 kilómetros hasta su casa, pero en ese trayecto, solo lo captaron dos cámaras de seguridad.
Heber, el padre de Nicolás, contó a la agencia Noticias Argentinas que se lo vio caminar solo en medio de la lluvia por la colectora de la Ruta 205, pero luego se perdió su rastro. "Una cámara de seguridad lo registró entrando al barrio El Trébol y esa es la última imagen que tenemos de él", sostuvo.
A unos 100 metros de ese lugar se encuentra el arroyo Aguirre y un precario puente peatonal. En ese momento, debido a la tormenta, el caudal debía ser intenso. "Especulan que quiso cruzarlo y la correntada se lo llevó, esa es la hipótesis que tiene la Policía ahora", señaló el hombre.
La señal del teléfono celular de Nicolás se interrumpió de manera repentina poco antes de las 3 de la madrugada. Esta pista, sumada a la lluvia y los videos, hacen que la hipótesis más firme para el fiscal y los investigadores de la DDI de Ezeiza sea la de un accidente fatal en medio de la tormenta.
A la familia le llamó la atención que el joven se haya ido solo del boliche pero, según el relato de sus amigos, no hubo ninguna pelea ni episodio extraño. Heber cree que su hijo se perdió dentro del local bailable, no pudo reencontrarse con los demás chicos y decidió emprender la vuelta a su casa.
Romina, la madre del Nicolás, sospecha que algo pudo pasarle en ese trayecto. "La última imagen lo muestra a una cuadra del puente ese. Pero él nunca pasaba por ese puente, no solía pasar por los lugares donde lo muestra la imagen", explicó a TN.
También señaló que la ropa con la que aparece en el video no es la misma que usaba cuando se fue de su casa. "Él salió con un buzo negro y un jean clarito, y en la última imagen se lo ve con una sola zapatilla y un jogging negro. Pensamos que pudo haber sido asaltado, pero no sabemos nada", sostuvo.
Este martes, los rastrillajes se concentran en el arroyo Aguirre, donde trabajan buzos especializados y perros rastreadores. Las tareas se desarrollan con dificultad ya que se trata de un curso de agua muy estrecho, con laterales empinados, barro y basura, que desemboca en el río Matanza.