El matrimonio igualitario entró en vigencia este jueves en Tailandia, convirtiéndose en el primer país del Sudeste Asiático en permitir las uniones entre personas del mismo sexo y el tercero en Asia, junto a Nepal y Taiwán.
Las parejas homosexuales gozarán de los mismos derechos que las heterosexuales, incluyendo herencia y adopción. Nepal y Taiwán son los otros dos.
El matrimonio igualitario entró en vigencia este jueves en Tailandia, convirtiéndose en el primer país del Sudeste Asiático en permitir las uniones entre personas del mismo sexo y el tercero en Asia, junto a Nepal y Taiwán.
La ley, aprobada por el Parlamento en junio y publicada en la Gaceta Real el 24 de septiembre, requirió 120 días para hacerse efectiva. A partir de este jueves, los matrimonios igualitarios son legales en la turística Tailandia.
Durante diez horas, los registros recibirán a parejas que deseen oficializar su unión. La primera pareja en hacerlo fueron Ployanapat Jirasukorn (33) y Kwanporn Kongphet (32), quienes sellaron su matrimonio en una ceremonia que congregó a cientos de parejas en el centro comercial Bangkok Siam Paragon.
Se espera que alrededor de 300 parejas participen en esta boda colectiva en la capital tailandesa. Este evento será seguido por un discurso de la primera ministra Paetongtarn Shinawatra, mientras que en varias provincias del país se celebrarán numerosos actos paralelos.
El ambiente festivo celebra los avances del colectivo LGBTI en Tailandia, que tras años de estancamiento debido a dos golpes militares desde 2006, se sitúa ahora a la vanguardia del Sudeste Asiático y gran parte de Asia.
Con la entrada en vigor del matrimonio igualitario, las parejas homosexuales en Tailandia gozarán de los mismos derechos que las heterosexuales, incluyendo herencia y adopción. En contraste, países como Indonesia, Malasia y Brunéi, de mayoría musulmana, siguen criminalizando las relaciones del mismo sexo.
Singapur, por su parte, no derogó la ley que penalizaba el sexo homosexual, sección 377A heredada del periodo colonial británico, hasta noviembre de 2022, mientras protegía constitucionalmente el matrimonio como una unión exclusivamente heterosexual.
En China, aunque la homosexualidad es legal desde 1997, el colectivo aún enfrenta numerosos prejuicios y desafíos. India despenalizó la homosexualidad en 2018, pero el matrimonio sigue reservado para parejas heterosexuales.
Japón es el único miembro del G7 que no reconoce el matrimonio homosexual, aunque sus tribunales y autoridades locales han dado pasos hacia una futura legalización.
Con esta medida, Tailandia se une a los pocos países de Asia que reconocen el matrimonio igualitario, siguiendo a Nepal, que lo legalizó el año pasado, y a Taiwán, pionero en aprobarlo en 2019.