El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil alcanzó la mayoría de votos necesaria para condenar al expresidente Fernando Collor de Mello, destituido tras un juicio político hace más de tres décadas, por cargos de corrupción y lavado de dinero.
Seis de los diez jueces de la Corte Suprema ya dieron a conocer su voto, cinco de ellos a favor de la condena. La sentencia final será conocida la próxima semana, cuando se retome el juicio en el plenario del máximo tribunal, y ahí se determinará el número de años de prisión.
El máximo tribunal votó en mayoría por condenar al exmandatario liberal, quien asumió en un contexto hiperinflacionario y tomó polémicas medidas para intentar controlarla, como un congelamiento del acceso a las cuentas bancarias.
El instructor del caso, el juez Edson Fachin, planteó una condena de 33 años de prisión y una pena pecuniaria de 20 millones de reales, unos cuatro millones de dólares, al considerar a Collor de Mello culpable de los delitos de corrupción pasiva, lavado de dinero y asociación ilícita.
Según lo argumentado por el juez, hay pruebas suficientes de que los crímenes ocurrieron y fueron cometidos por Collor cuando era senador.
Fernando Collor de Mello, hoy de 73 años, fue elegido presidente de Brasil en 1990 venciendo a un joven Lula da Silva y renunció en 1992 cuando el Parlamento se disponía a elevar un juicio de destitución en su contra, por acusaciones de presunta corrupción de las que luego sería absuelto en la Justicia.
Además, el expresidente ocupó una banca en el Senado entre 2007 y 2023. El año pasado fue candidato a gobernador del estado de Alagoas, puesto que había ejercido antes de llegar a la presidencia.