La defensa del expresidente brasileño Jair Bolsonaro le pidió al Supremo Tribunal Federal (STF) que revoque la prisión domiciliaria y otras medidas cautelares, como la prohibición de usar redes sociales, en el marco de una causa secundaria que lo investiga por presunta obstrucción a la Justicia.
El líder derechista fue condenado a 27 años y 3 meses de prisión por liderar una "organización criminal" para cometer un golpe de Estado contra Lula da Silva. Al mismo tiempo, una causa paralela investiga presuntas maniobras de su hijo, Eduardo Bolsonaro, para que Estados Unidos presione a Brasil con distintas sanciones.
El abogado del exmandatario, Paulo Cunha Bueno, argumentó que Bolsonaro "no fue acusado por el Ministerio Público" en esta segunda causa, por lo que "se elimina la necesidad de cualquier medida cautelar". "Sin acción penal, las medidas cautelares se convertirán en un fin en sí mismas y no habrá forma de mantenerlas legalmente, por lo que la defensa espera su pronta revocación", expresó en redes sociales.
La denuncia presentada por la Fiscalía ante la Corte Suprema apunta contra el diputado Eduardo Bolsonaro y el bloguero y periodista Paulo Figueiredo, a quienes acusó del delito de "coacción a la Justicia". La Policía Federal presentó cargos contra Jair Bolsonaro, pero la Fiscalía no los formalizó.
Los abogados también pidieron que se revoquen las medidas cautelares, que incluyen el uso de tobillera electrónica y la prohibición de usar redes sociales y acercarse a embajadas, entre otras. Bolsonaro está bajo arresto domiciliario desde el 4 de agosto por violar estas medidas. De todas maneras, la Fiscalía ya aclaró que el expresidente continúa como investigado en la causa.