El famoso expresentador de la BBC Huw Edwards evita la prisión tras escándalo de pornografía infantil, ya que fue condenado a seis meses de cárcel pero con suspensión de la pena por dos años.
La exestrella de la cadena británica se declaró culpable y la Justicia lo condenó a seis meses de cárcel.
El famoso expresentador de la BBC Huw Edwards evita la prisión tras escándalo de pornografía infantil, ya que fue condenado a seis meses de cárcel pero con suspensión de la pena por dos años.
La justicia británica condenó este lunes a seis meses de cárcel, con suspensión de la pena durante dos años, al expresentador estrella de la BBC Huw Edwards. Con esta sentencia, el que fuera el presentador del informativo de las 22 hs de la BBC durante veinte años, evita la prisión y solo cumplirá esos seis meses de cárcel si vuelve a delinquir en un período de dos años.
Tras este escándalo que provocó hace algo más de un año su salida de la cadena pública británica, Edwards se había declarado en julio culpable de la "realización de imágenes indecentes de niños", lo que le evitó un largo y mediático proceso. El expresentador corría el riesgo de ser condenado a diez años de prisión firme.
Sin embargo, el juez del Tribunal de Magistrados de Westminster, en Londres, aceptó las alegaciones de la fiscalía, que puso de relieve sus problemas psicológicos y el "sincero remordimiento" que había expresado. "Su reputación está hecha añicos", dijo el juez Paul Goldspring al acusado mientras dictaba sentencia.
Durante la audiencia, el abogado de Huw Edwards, Philip Evans, afirmó que su cliente reconoció la "naturaleza repugnante" de las imágenes que había recibido y que estaba "profundamente arrepentido". "Traicionó la inestimable confianza de mucha gente", añadió.
Según la investigación abierta contra Edwards, el expresentador estuvo en contacto por WhatsApp con un hombre que le envió 41 imágenes de pornografía infantil, algunas de las cuales muestran a un niño de entre siete y nueve años, recibidas entre diciembre de 2020 y agosto de 2021. Las imágenes habían sido "claramente enviadas con el acuerdo del señor Edwards", según la fiscalía.