Tras meses de amenazas y negociaciones, este jueves comienzan a regir los aranceles recíprocos impulsados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, una medida tomada en el marco de la guerra comercial desatada mientras se reconfigura el mapa de potencias mundiales y sus influencias.
Según la Casa Blanca, la decisión busca responder a "una amenaza extraordinaria" derivada de un saldo negativo persistente a nivel comercial y a la presunta falta de reciprocidad en acuerdos con otros países. Así, se decidió imponer un arancel mínimo del 15% para muchos de los países con los que EEUU mantiene una balanza comercial negativa y del 10% para aquellos con los que tiene superávit, como fue el caso de Argentina.
De esa manera, la mayoría de los países vieron reducidos sus aranceles respecto a los anunciados el pasado 2 de abril, incluso entre quienes recibieron un recargo por encima de la media. Entre los casos destacados están Camboya, que pasó de un 49% a un 19%; Lesoto, de 50% a 15%; Vietnam, de 46% a 20%; Tailandia, de 36% a 19%; y Madagascar, de 47% a 15%.
A fin de cuentas, solo tres países recibieron aumentos en sus aranceles respecto al listado de abril: la República Democrática del Congo, Guinea Ecuatorial y Suiza, esta última pasando del 31% al 39%, el mayor incremento registrado en el viejo continente. Los países con los gravámenes más altos son Siria (41%), Laos (40%) y Myanmar (40%). También se fijaron tasas del 35% para Irak y Serbia, y del 30% para Argelia, Bosnia y Herzegovina y Libia.
Desde el gobierno de Javier Milei aseguraron que iniciaron negociaciones para reducir los aranceles para Argentina. En su informe, el staff del Fondo Monetario Internacional (FMI) calculó que el impacto directo sería reducido: las exportaciones argentinas a Estados Unidos caerían sólo entre 300 y 500 millones de dólares al año.
Las particularidades del BRICS
India quedó con un arancel del 25%, apenas un punto por debajo del fijado en abril, aunque este miércoles se conoció que recibirá un incremento de otro 25% si no frena sus compras al petróleo de Rusia, sancionado a gran escala tras su invasión a Ucrania. Sin embargo, ese incremento sobre los productos indios se vería reflejado dentro de 20 días.
Otro miembro del BRICS que recibió un tratamiento diferencial fue Brasil. Pese a que el arancel recíproco que tiene el país gobernado por Lula Da Silva es del 10%, también enfrentará un recargo adicional del 40% como represalia por el juicio al expresidente Jair Bolsonaro, a quien Trump considera un aliado. Mientras, Sudáfrica recibió gravámenes del 30%.
Por su parte, Estados Unidos sigue las negociaciones con China y alcanzó un acuerdo temporal: redujo sus aranceles del 145% al 30%, mientras que Beijing bajó los suyos del 125% al 10%. También se levantaron restricciones al comercio de tierras raras y semiconductores.
Las negociaciones para un pacto definitivo deben concluir antes del 12 de agosto. Trump adelantó que las conversaciones “marchan bien”, sin ofrecer detalles.