Con el paso de los años, mantener una rutina de actividad física se vuelve esencial para conservar la fuerza, la movilidad y la autonomía. Los especialistas coinciden en que realizar ejercicios regulares ayuda a prevenir lesiones, mejorar el equilibrio y preservar la calidad de vida en la adultez mayor.
Entre las opciones más recomendadas por los profesionales se encuentran las sentadillas con apoyo en una silla, un ejercicio sencillo que puede hacerse en casa, sin necesidad de aparatos ni entrenamiento previo. Reproduce un movimiento cotidiano —sentarse y levantarse—, lo que lo convierte en una herramienta eficaz para mantener la funcionalidad del cuerpo.
Además de ser una actividad segura y de bajo impacto, las sentadillas contribuyen a fortalecer los músculos de las piernas y los glúteos, mejoran la postura y favorecen la estabilidad. Es un ejercicio accesible, ideal para quienes buscan incorporar movimiento a su rutina diaria de manera práctica y progresiva.
sentadillas con silla
Un ejercicio efectivo para mantenerse en forma
Este movimiento trabaja los cuádriceps, glúteos e isquiotibiales, músculos clave para mantener la movilidad y la independencia. Estudios recientes muestran que la capacidad de levantarse repetidamente de una silla sin ayuda está directamente asociada con un mejor equilibrio y un menor riesgo de caídas en adultos mayores.
Incorporar ejercicios simples como las sentadillas a una silla en la rutina diaria puede marcar una gran diferencia en el bienestar general, contribuyendo a una vida más activa, segura y saludable.