En el primer semestre de 2025, la pobreza en Argentina alcanzó al 31,6% de la población, equivalente a 9,5 millones de personas, mientras que la indigencia se ubicó en 6,9% (2,1 millones), informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El reporte indicó que el 24,1% de los hogares quedó por debajo de la línea de pobreza, y dentro de ese conjunto, el 5,6% se encuentra en situación de indigencia. En números absolutos, son 2,45 millones de hogares pobres, de los cuales 565 mil están en la indigencia.
En comparación con el segundo semestre de 2024, cuando la pobreza se ubicó en el 38,1%, la pobreza descendió 6,5 puntos porcentuales en personas y 4,5 puntos en hogares. La indigencia también cayó: 1,3 puntos en personas y 0,8 en hogares.
Según el organismo, la mejora estuvo vinculada al incremento del ingreso total familiar, que creció en promedio 26,3%, por encima de las subas de la canasta básica alimentaria (13,2%) y de la canasta básica total (12,3%).
Pese al descenso, la brecha de ingresos se mantuvo elevada: el ingreso promedio de los hogares pobres fue de $671.492 frente a una canasta básica total estimada en $1.065.691, lo que deja una distancia del 37%.
La pobreza continúa golpeando con más fuerza a niños y adolescentes: el 45,4% de las personas de 0 a 14 años viven en hogares pobres. Entre los jóvenes de 15 a 29 años, la tasa es de 37%; en los adultos de 30 a 64, de 27,7%; y en mayores de 65 años, de 10,8%.
Por regiones, las mayores incidencias se dieron en el Noreste (39%) y en Cuyo (33,8%), mientras que los niveles más bajos se registraron en la Patagonia (27%) y la región Pampeana (30,5%).
En los grandes aglomerados urbanos, la pobreza bajó seis puntos porcentuales frente al semestre previo; en las ciudades de menor tamaño, la reducción fue más pronunciada, de 8,8 puntos.