El Gobierno actualizó nuevamente los precios de los biocombustibles a partir de este lunes para evitar "distorsiones", lo que podría tener un impacto en el costo de la nafta y el gasoil, luego de que se implementara un incremento del 4% a comienzos de noviembre. El último aumento había sido el pasado martes.
La decisión se puso en marcha a través de las resoluciones 16 y 17 de la Secretaría de Coordinación de Energía y Minería, publicadas en el Boletín Oficial con la firma de su titular, Daniel González Casartelli.
La normas establecen la suba del bioetanol a $683,305 el litro elaborado a base de caña de azúcar y a $626,273 el elaborado a base de maíz, además de $1.023.649 la tonelada de biodiésel, lo que representa un 1,9% de aumento.
De acuerdo a las resoluciones, estos aumentos responden a subsanar los "desfasajes resultantes de su implementación y los costos reales de elaboración de los productos", aunque también se justifica los aumentos en el caso de que dicho precio pueda generar "distorsiones" en los precios del combustible fósil en surtidor.
Nafta gasoil surtidor estación de servicio
Télam
El incremento podría tener impacto en el precio de venta de los combustibles, ya que se utilizan para el corte del 5% en la nafta y el gasoil.
Durante el fin de semana, Federico Martelli, director ejecutivo de Cámara de Empresas PYMEs Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (CEPREB), habló con Radio Continental sobre la paralización de la producción realizada la semana pasada en reclamo por un mayor aumento de precios, ya que consideran que se encuentren "atrasados".
"El precio lo fija la Secretaría de Energía. Ya hay plantas que paralizaron la producción. Hay un atraso del 18% en el precio del biodiésel. Esto complica a las empresas, que son pymes, y también la cadena de producción", manifestó al respecto de un conflicto que puede hacer peligrar el abastecimiento de combustibles e incrementar su precio.