El partido entre Independiente y Platense, que estaba programado para el domingo a las 20.30 por la sexta fecha de la Zona B del Torneo Clausura 2025, fue postergado y deberá ser reprogramado. La decisión la tomó la Aprevide, luego de los graves incidentes registrados el miércoles en el estadio Libertadores de América-Ricardo Bochini, durante el encuentro frente a Universidad de Chile por la Copa Sudamericana.
La medida se resolvió, pese a que la Justicia había dejado abierta la posibilidad de que el duelo se disputara sin público en Avellaneda o en otro escenario. Finalmente, se optó por postergarlo hasta que se defina una nueva fecha.
“Desde el Club Atlético Independiente aceptamos la solicitud de A.Pre.Vi.De para posponer el partido con Platense, de manera que pueda realizarse con público, en nuestro estadio y en la fecha que determine la Justicia. Los socios e hinchas de Independiente fueron víctimas de lo ocurrido en el cruce con la Universidad de Chile y nuestro compromiso es que puedan alentar al equipo en su cancha”, expresó la institución en un comunicado oficial.
Tras una inspección de la Municipalidad de Avellaneda, Aprevide elaboró un informe que presentó a la Liga Profesional, recomendando la suspensión del encuentro. Mientras tanto, la Justicia continúa con la investigación de los episodios violentos ocurridos durante el cruce por los octavos de final de la Copa Sudamericana ante la U. de Chile.
Este viernes, la Fiscalía N°4 de Avellaneda había solicitado que Independiente no pudiera jugar con público en su estadio. El Juzgado de Garantías N°3, a cargo de José Luis Arabito, avaló la disputa del partido en Avellaneda pero solo a puertas cerradas, dejando como alternativa la presencia de hinchas únicamente en caso de trasladar la localía.
Más temprano, el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, había anticipado en Radio 10 que el estadio podía ser clausurado. “El fiscal pidió la clausura porque en la tribuna hay manchas hepáticas arteriales que deben ser peritadas”, señaló. En la presentación judicial se solicitó la suspensión preventiva de la cancha para partidos con público, aunque se contemplaba la opción de jugar sin espectadores o en otro estadio.