Luego de haber perdido 2 a 1 frente a Bayern Múnich en la segunda fecha del Grupo C del Mundial de Clubes, Boca se juega la vida ante Auckland en la última jornada, rival al que deberá propinarle una goleada histórica y, además, deberá esperar que se den una serie de resultados. ¿Qué tiene que pasar?
Bayern se posiciona como líder del grupo con seis puntos. Lo sigue Benfica con cuatro unidades, y el Xeneize quedó tercero con apenas un punto, mientras que los neozelandeses marchan en el fondo de la tabla, sin haber sumado ni una unidad.
El equipo dirigido por Miguel Ángel Russo necesita una verdadera hazaña para seguir con vida en el torneo: debe vencer a Auckland City por una diferencia de más de seis goles y esperar que Bayern le gane a Benfica por la mínima. O, en su defecto, ganarle al equipo neozelandés y esperar que los alemanes goleen al conjunto de Ángel Di María y Nicolás Otamendi.
En caso de un empate entre los europeos o una victoria del Benfica, Boca quedaría automáticamente eliminado. No obstante, si se dan ciertos resultados, la clasificación podría definirse por diferencia de gol, lo que mantiene una mínima esperanza para el conjunto argentino.