El sitio web oficial del Vaticano publicó la lectura recomendada para hoy jueves 3 de octubre. El objetivo es, de manera diaria, invitar a los fieles a profundizar en su fe y reflexionar en su camino espiritual mediante la lectura sugerida del Evangelio y el santo del día.
En la misa, uno de los momentos más importantes de la celebración es la liturgia de la Palabra. En ese momento se leen los pasajes de la Biblia que permiten entender las enseñanzas de Jesús. Además de proporcionar estos textos, todos los días, el Papa Francisco escribe unas palabras animando a los creyentes a vivir de acuerdo con las enseñanzas del Evangelio.
En su mensaje del día de hoy, el Santo Pontífice destacó: "Dios no tiene dificultad para hacerse entender por los niños, y los niños no tienen problemas para comprender a Dios. No por casualidad en el Evangelio hay algunas palabras muy bonitas y fuertes de Jesús sobre los `pequeños`. Este término se refiere a todas las personas que dependen de la ayuda de los demás, y en especial a los niños. Y todos necesitamos ayuda, amor y perdón. Por todos estos motivos Jesús invita a sus discípulos a 'hacerse como niños', porque 'de los que son como ellos es el reino de Dios`".
Evangelio
La liturgia católica diaria ofrece una oportunidad para la reflexión espiritual, y la publicación de hoy destaca tanto la lectura recomendada como el santo del día, invitando a los fieles a profundizar en su fe.
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Primera lectura para hoy, 3 de octubre de 2024
La página web del Vaticano indica que para hoy la lectura recomendada es el libro de Job, Job 19, 21-27.
Job tomó la palabra y dijo:
“Tengan compasión de mí,
amigos míos, tengan compasión de mí,
pues me ha herido la mano del Señor.
¿Por qué se ensañan contra mí, como lo hace Dios,
y no se cansan de escarnecerme?
Ojalá que mis palabras se escribieran;
ojalá que se grabaran en láminas de bronce
o con punzón de hierro se esculpieran
en la roca para siempre.
Yo sé bien que mi defensor está vivo
y que al final se levantará a favor del humillado;
de nuevo me revestiré de mi piel
y con mi carne veré a mi Dios;
yo mismo lo veré y no otro,
mis propios ojos lo contemplarán.
Esta es la firme esperanza que tengo’’.
Evangelio de hoy, jueves 3 de octubre de 2024
También publicaron la lectura del santo evangelio según san Lucas Lc 10, 1-12.
En aquel tiempo, designó el Señor a otros setenta y dos discípulos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares a donde pensaba ir, y les dijo: “La cosecha es mucha y los trabajadores pocos. Rueguen, por lo tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos. Pónganse en camino; los envío como corderos en medio de lobos. No lleven ni dinero, ni morral, ni sandalias y no se detengan a saludar a nadie por el camino. Cuando entren en una casa, digan: ‘Que la paz reine en esta casa’. Y si allí hay gente amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá; si no, no se cumplirá. Quédense en esa casa. Coman y beban de lo que tengan, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de casa en casa. En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman lo que les den. Curen a los enfermos que haya y díganles: ‘Ya se acerca a ustedes el Reino de Dios’.
Pero si entran en una ciudad y no los reciben, salgan por las calles y digan: ‘Hasta el polvo de esta ciudad que se nos ha pegado a los pies nos lo sacudimos, en señal de protesta contra ustedes. De todos modos, sepan que el Reino de Dios está cerca’. Yo les digo que en el día del juicio, Sodoma será tratada con menos rigor que esa ciudad”.
Santo del día: San Francisco de Borja
San Francisco de Borja (1510 – 1572) fue el tercer general de la Compañía de Jesús y antes de su ingreso a la orden tuvo el título de IV duque de Gandía y virrey de Cataluña. Proveniente de una familia noble, entre cuyos ancestros se contaba el papa Alejandro VI, Francisco entró desde muy joven a la corte del rey Carlos V. Allí desempeñó diferentes cargos, entre ellos el cuidado de la reina Juana I, recluida por su supuesta demencia en el palacio de Tordesillas.
Cada 3 de octubre la Iglesia Católica celebra la fiesta de San Francisco de Borja, hombre inicialmente llamado por Dios al matrimonio -formó una familia-, que, tras enviudar tempranamente, descubrió una llamada singular: seguir los pasos de Cristo como religioso.