El director de la clínica donde operaron a Diego Maradona declaró que "lo querían sedado"

Pablo Dimitroff brindó este martes testimonio durante la 15° jornada del proceso judicial y recordó que no recomendaba una internación domiciliaria del astro argentino. "No le iba a ir muy bien", señaló.

El director de la Clínica Olivos donde Diego Maradona estuvo internado luego de su operación, Pablo Dimitroff, declaró este martes en una nueva jornada del juicio por la muerte del astro argentino y aseguró que "lo querían sedado" y además recordó que no recomendaba una internación domiciliaria del Diez: "No le iba a ir muy bien", señaló.

En su declaración ante los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach del Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de San isidro, Dimitroff calificó a Maradona como un paciente violento, que no podía estar en una casa y responsabilizó de una mala praxis en su tratamiento a Leopoldo Luque y Agustina Cosachov, imputados en la causa.

"Luque y Cosachov nos pedían que hiciéramos algo para que el paciente estuviera tranquilo y se limitaban a decir ‘por favor, sédenlo, hagan algo para que no esté así’. Había que sedarlo, pero una cosa es sedarlo como parte de una etapa que tiene un seguimiento y otra es sedarlo y que después no haya nada", señaló ante los jueces.

En el mismo sentido, detalló que mantuvo más de cuatro reuniones con ellos para coordinar las acciones posteriores a la externación de Maradona. El 3 de noviembre de 2020 Maradona había sido trasladado a la Clínica Olivos para someterse a una operación tras sufrir un hematoma subdural. Ingresó y a las dos horas y media ya estaba realizado el post quirúrgico.

Entre el viernes 6 y el sábado 7 de noviembre de ese año Maradona estuvo sedado. “Luque y Cosachov pedían la sedación”, afirmó el director y remarcó que “es algo que no puede ser permanentemente” y que “no estaba claro el plan de parte de ellos de cómo continuar el tratamiento”.

La situación de los imputados por la muerte de Maradona

El juicio oral y público tiene como implicados al neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, el enfermero Ricardo Omar Almirón; el jefe de enfermeros, Mariano Perroni; el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna, y la coordinadora de Swiss Medical, Nancy Edith Forlini.

Todos ellos se encuentran acusados por el delito de homicidio simple con dolo eventual, un ilícito que prevé una pena de hasta 25 años de cárcel, según el Código Penal. Se investiga si incurrieron en presunta negligencia médica por no cuidar al ex jugador o si murió de forma natural.

En tanto, la enfermera Dahiana Gisela Madrid, patrocinada por el abogado Rodolfo Baqué, enfrentará un juicio por jurados populares durante la segunda parte del año.

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