Dos policías de Córdoba fueron condenados con prisión efectiva por haber desobedecido órdenes judiciales en el caso del femicidio de Giuliana Marianela Silva, de 19 años, asesinada el 7 de julio de 2019 por su ex pareja Rodolfo Tissera, quien la mató de tres balazos cuando debió haber estado custodiada por uniformados.
Se trata de Hugo Javier Maza y José Ramón Guevara, quienes no cumplieron con el pedido de custodiar a Silva. Tissera, el asesino, ya fue condenado a prisión perpetua por la Cámara Primera.
La Cámara Décima del Crimen declaró a Maza, por unanimidad, responsable del delito de abuso de autoridad y le impuso una pena de un año y cinco meses de prisión efectiva e inhabilitación especial por doble tiempo de la condena; y a Guevara, autor penalmente responsable del delito de abuso de autoridad e imponerle para su tratamiento penitenciario la pena de un año y ocho meses de prisión efectiva e inhabilitación especial por doble tiempo de la condena.
Giuliana Marianela Silva víctima femicidio Córdoba 2019 barrio Suárez
La vivienda del barrio Suárez de Córdoba donde ocurrió el crimen.
El caso tuvo un fuerte impacto en la comunidad porque la víctima tenía un botón antipánico que había usado la noche anterior al hecho, luego de que el femicida incumpliera la restricción que le habían impuesto.
Tras esta situación, Silva hizo una nueva denuncia, y fue allí cuando desde la Unidad Judicial ordenaron al oficial subinspector Maza y al comisario Guevara que debían disponer una urgente consigna policial en el domicilio de la joven amenazada. Ambos efectivos se rehusaron a cumplir con la orden en sus respectivos turnos.
Fue así que a las pocas horas, alrededor de las 22 del 7 de julio de 2019 y en un ataque totalmente planificado, el femicida Tissera sorprendió a Giuliana y la mató de dos disparos en el tórax y uno en la cabeza. Tenían en común un hijo de un año y cinco meses.
Giuliana Marianela Silva femicidio Córdoba 2019.avif
Rodolfo Tissera, femicida de Giuliana Marianela Silva, fue condenado a perpetua.
Tras el crimen, el abuelo de la víctima contó: "Él tenía todo premeditado, ni a un perro se lo puede matar así. Rompió un vidrio porque no lo dejaban entrar y ahora volvió, esperó que no hubiera nadie para matarla", detalló entonces a Radio Mitre Córdoba.
"Él es una persona violenta, se separaron hace casi un año porque la golpeó. El jueves violó la restricción perimetral, ella accionó el botón antipánico e hizo la denuncia, pero no se tomó ninguna medida. Volvió con un arma, se escondió y la mató", relató.
El hombre trabajaba como sereno en una casa del barrio Suárez cuando escuchó cuatro disparos y al acercarse al lugar observó a Tissera con una pistola en la mano: "En ese momento pensé lo peor, dejé todo y fui a buscar a mi nieta", narró.