Una jubilada de 79 años fue detenida en el barrio porteño de Liniers luego de que una vecina denunciara que le robó mediante la modalidad "viuda negra", un delito por el que la sospechosa tiene antecedentes e incluso ya había sido condenada en 2007.
Fue detenida luego de que una vecina denunciara que la dopó, ingresó a su casa y le robó $100.000 y otras pertenencias. Es jubilada y pensionada y tiene antecedentes por delitos similares desde 2007.
Una jubilada de 79 años fue detenida en el barrio porteño de Liniers luego de que una vecina denunciara que le robó mediante la modalidad "viuda negra", un delito por el que la sospechosa tiene antecedentes e incluso ya había sido condenada en 2007.
Efectivos de la Comisaría Vecinal 11A de la Policía de la Ciudad detuvieron a la mujer, identificada como Gloria Aurora, en el cruce de Oliden y Ramón Falcón. Según la denuncia del 20 de agosto pasado, drogó a otra jubilada del barrio, ingresó a su vivienda y le robó $100.000 en efectivo, cuatro perfumes y una cadena de oro.
"Le pidió a una vecina que le dé un vaso de agua porque necesitaba tomar una pastilla. Aurora le convida agua, la mujer comienza a sentirse mal e inmediatamente se desmaya. Aurora ingresó a su vivienda y le robó todo", explicó el periodista Diego Gabriele en La Mañana por C5N.
Añadió que la detenida "tiene antecedentes por haber drogado y dormido a un hombre que la llevó a su vivienda, y también por haber drogado a otro hombre de 83 años mientras tomaba un café en un bar. No ha registrado un trabajo en blanco en toda su vida y hoy está cobrando muy poco dinero por una pensión y su jubilación", señaló.
El antecedente más reciente es de julio de este año, cuando la mujer drogó a un jubilado en una confitería de Villa Santa Rita. El hombre se desmayó y fue trasladado al Hospital Álvarez. Al mismo tiempo, su vecino denunció que una desconocida había ingresado al departamento y Aurora fue arrestada.
El caso por el que fue condenada data de 2007. En esa ocasión, aprovechó que el hombre la había invitado a su casa de Mataderos y le colocó tranquilizantes en el té. Sin embargo, el hijo del dueño de casa llegó al lugar y descubrió la maniobra, por la que fue condenada a tres años y nueve meses de prisión.