Sesiones extraordinarias: negociaciones frenéticas en Diputados y demora en Senado por la reforma laboral

El Congreso inició las extraordinarias con fuerte rosca por las comisiones en Diputados y con el Senado a la espera del proyecto de reforma laboral, que aún no fue enviado por la Casa Rosada. Mientras el oficialismo busca acelerar el tratamiento del Presupuesto y otros proyectos clave, Patricia Bullrich presiona para obtener la media sanción de la reforma pese a los tiempos acotados y la negociación abierta por la conformación de las comisiones.

El período de sesiones extraordinarias convocado por el Poder Ejecutivo comenzó este miércoles oficialmente y el Congreso ya se mueve en dos velocidades. Mientras Diputados atraviesa horas intensas de negociaciones por la integración de las comisiones, en el Senado crece la expectativa por el inminente ingreso del proyecto de reforma laboral.

Tras la confirmación de Martín Menem como presidente de la Cámara baja, quedó también en manos del riojano la definición del criterio para repartir los lugares en las comisiones. Esa atribución desató una rosca a contrarreloj: cada espacio busca garantizarse la cantidad de bancas necesarias para influir en los dictámenes, instancia clave antes de llegar al recinto.

Menem aún no reveló si aplicará el sistema D’Hondt por bloque, por interbloque o por “espacios políticos”. Lo único que dan por seguro en su entorno es que elegirá el mecanismo que garantice al oficialismo la mayoría suficiente para acelerar el tratamiento del Presupuesto. La meta es clara: dictamen rápido y sesión la próxima semana. La idea en Diputados es comenzar el lunes con el trabajo de las comisiones y llegar al recinto entre miércoles y jueves.

Mientras tanto, continúa la disputa interna sobre cuántos lugares corresponderán a cada bancada y, luego, quiénes ocuparán esas sillas. La definición llegará en las próximas horas.

Comisiones clave y negociaciones por el Presupuesto

La intención del oficialismo es tratar en la misma sesión el Presupuesto y dos proyectos más: el de “inocencia fiscal” (los llamados “dólares del colchón”); y el Compromiso Nacional para la Estabilidad Fiscal y Monetaria, que restringe la emisión de dinero por parte de los funcionarios.

Las primeras comisiones que se constituirán serán Presupuesto y Hacienda y Legislación Penal. En la primera continuará al frente “Bertie” Benegas Lynch. La segunda, que deberá tratar el proyecto de “inocencia fiscal”, probablemente continúe siendo presidida por la cordobesa Laura Rodríguez Machado.

Respecto del Presupuesto, siguen sin conocerse los cambios que el oficialismo está dispuesto a conceder a gobernadores que reclaman obras, fondos ATN y apoyo para cajas previsionales. Pese a las tensiones, en varios bloques aliados dan por descontado que el Presupuesto se aprobará: “Todos queremos que haya Presupuesto”, señalan.

Senado: Bullrich espera el proyecto y quiere acelerar la reforma laboral

En la Cámara alta, la conducción del oficialismo está concentrada en la reforma laboral. Patricia Bullrich —senadora, exministra de Seguridad y jefa del bloque— es quien empuja la iniciativa, pero hasta ahora el proyecto no ingresó formalmente. Sin ese paso, no pueden constituirse las comisiones ni comenzar su tratamiento. Lo más probable es que recién pueda empezar a tratarse la próxima semana.

Ayer la Casa Rosada presentó el informe del Consejo de Mayo, gesto que generó movimientos en la CGT, cuyo Consejo Directivo visitó hoy al bloque peronista del Senado. Pero el texto de la reforma aún no llegó, lo cual mantiene todo en pausa.

En el Senado rige además una norma que complica los tiempos: una vez obtenido el dictamen, debe pasar una semana para poder llevar el proyecto al recinto, salvo que haya acuerdo de dos tercios para tratarlo sobre tablas. Aun así, Bullrich mantiene la intención de avanzar con rapidez y obtener la media sanción durante las extraordinarias- un verdadero desafío-, pese a que se trata de una reforma de alto impacto político y social.

Más allá de la reforma laboral, en el propio oficialismo reconocen que el resto del temario quedará para otra convocatoria, probablemente entre la segunda quincena de enero y fines de febrero. Este diciembre solo quedan doce días hábiles y los lunes y viernes suelen tener actividad reducida por los traslados de los legisladores a sus provincias.

El desafío para La Libertad Avanza será combinar la presión por resultados rápidos con la muñeca política necesaria para ordenar alianzas, sumar votos y atravesar un primer período extraordinario que promete ser tan breve como intenso