El presidente Alberto Fernández y su par boliviano, Luis Arce, inauguraron este jueves el electroducto Juana Azurduy de Padilla. Se trata de la primera vinculación eléctrica que une Argentina y Bolivia y que permitirá el intercambio comercial de energía entre ambos países.
El acto se realizó este mediodía en la localidad boliviana de Yaguacua. La obra conectará la central generadora de esa ciudad con la Estación transformadora Tartagal, en Salta, para mejorar el servicio eléctrico del sistema NOA Norte del noroeste argentino.
De esta manera, Bolivia podrá conectarse al sistema de transporte de alta tensión y dejar de ser el único país limítrofe que no estaba incorporado. Fernández aprovechó la ocasión para agradecer la colaboración del presidente Arce y destacó que "Bolivia siempre estuvo dándonos gas, aún en los momentos difíciles".
"Cuando nos hizo falta, llamé con algún grado de preocupación a mi amigo Lucho y siempre encontré la respuesta de un hermano y siempre lo pudimos resolver", resaltó el mandatario argentino.
Agregó que ambos gobiernos comparten "las miradas de poner igualdad y justicia en nuestros países, preservar el Estado de derecho, proclamar la unidad de las fuerzas populares y construir una América Latina que se integre", y que "una de esas pruebas" es el electroducto.