Parlamento disuelto y llamado a elecciones, ¿cómo llegó Ecuador a esta situación?

Aunque se trata de un recurso constitucional incorporado en la Carta Magna en 2008, pocos creían que el presidente Guillermo Lasso se atrevería a aplicarlo.

Guillermo Lasso disolvió la Asamblea Nacional y convocó a elecciones en un movimiento inesperado pero probable. Aunque se trata de un recurso constitucional incorporado en a la Carta Magna de Ecuador en 2008, pocos creían que el presidente podía atreverse a aplicar la “muerte cruzada”, pero en efecto, fue el instrumento del que se valió para dar por zanjado el nuevo juicio político que recientemente había comenzado en su contra.

La oposición acusaba a Lasso del delito de peculado, o malversación de fondos, por no terminar un contrato entre la Flota Petrolera Ecuatoriana y el consorcio Amazonas Tankers para el transporte de derivados de petróleo. De acuerdo a sus argumentos, este contrato habría causado graves perjuicios económicos al Estado. Pero Lasso se presentó el martes frente a los asambleístas para ejercer su defensa y rechazó haber cometido un delito, indicando que el contrato fue firmado en 2018 por el gobierno de Lenín Moreno y prorrogado sin objeciones ni recomendaciones de la Contraloría. El sábado era el día previsto para que se desarrollara la votación que podría haber derivado en su destitución. Se necesitaban 92 de los 137 votos y todo indicaba que podía reunirse el número.

Decretada la “muerte cruzada”, opositores anunciaron que interpondrían demandas de inconstitucionalidad, porque rechazan la existencia de una “grave conmoción interna y política”, el argumento declarado por Lasso en su decreto. Si la Corte Suprema declara la inconstitucionalidad, la Asamblea seguirá en funciones, pero si la ratifica, habrá elecciones.

Lo cierto es que el Consejo Nacional Electoral anunció que ya comenzó con el operativo para la convocatoria anticipada a elecciones. Los comicios deberán realizarse en el plazo de 90 días, pero dada la circunstancia, quien gane la Presidencia no asumirá el 24 de mayo como establece la Constitución. Todo esto se resolverá en un plazo máximo de 6 meses.

¿Quiénes podrían ser los candidatos presidenciales? Dentro del correísmo está por verse. Las conversaciones ya iniciaron desde Bélgica, en donde reside en el asilo Rafael Correa. Mientras tanto, algunos otros nombres aparecen en la lotería electoral. Ya se anotó Fernando Villaviencio, quien presidió la comisión del juicio político y enemigo histórico de Correa, Leónidas Iza deberá convencer a los propios dentro del grupo indígena y Yaku Pérez podría volver a candidatearse con el movimiento Somos Agua, tras quedar tercero en las últimas elecciones.

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