El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expuso que espera cerrar un acuerdo comercial en octubre con su par de China, Xi Jinping, y viajar a ese país en 2026, en medio de una relación de tire y afloje entre ambas naciones por los aranceles y la tensión en los diálogos.
Trump recibió en la Casa Blanca al primer ministro de Australia, Anthony Albanese, y reconoció que busca "cerrar un acuerdo comercial justo con Beijing". Además, se mostró optimista sobre la relación entre Estados Unidos y China y marcó que podría estabilizarse.
El cónclave está previsto que se lleve a cabo en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico de Corea del Sur, que se desarrollará del 31 de octubre al 1° de noviembre. Además, se producirá después de que el Ministerio de Comercio chino acusara al país norteamericano de "hacer descarrilar" el diálogo comercial bilateral y advirtiera que las amenazas de Washington "no son la forma correcta de relacionarse con China".
Donald Trump y Xi Jinping.png
Donald Trump junto a Xi Jinping.
En tal sentido, un portavoz de la cartera aseguró en un comunicado que las “contramedidas” anunciadas por Pekín, entre las que se incluyen nuevas restricciones a la exportación de tierras raras y productos vinculados a su procesamiento, son “actos necesarios de defensa pasiva para preservar los legítimos derechos e intereses de las empresas e industrias chinas”.
“Esperamos que Estados Unidos reconozca su error, avance con China en la misma dirección y regrese al camino del diálogo y las consultas”, señaló el vocero, quien advirtió que si Washington insiste “en el camino erróneo”, Pekín adoptará “medidas resueltas” para protegerse.
Los dichos respondieron directamente a la postura de Trump sobre los aranceles a los productos chinos y aumentar los controles sobre la exportación de tecnología. “No queremos una guerra comercial, pero tampoco la tememos”, recalcó el portavoz.
El arancel del 100% de Donald Trump a importaciones de China
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump sacudió al mundo comercial al adelantar que impondrá un arancel del 100% a las importaciones de China, tras un nuevo capítulo en la guerra comercial entre ambos países: "A partir del 1 de noviembre de 2025 (o antes, dependiendo de las medidas o cambios que adopte China), Estados Unidos impondrá un arancel del 100 % a China, además de cualquier arancel que esté pagando actualmente e impondrá controles de exportación a todo software crítico", expresó.
El anuncio se produjo el 10 de octubre mediante un extenso mensaje en la red Truth Social, y luego de que Trump acusara a China de imponer restricciones a la exportación de tierras raras, materiales esenciales para la fabricación de dispositivos tecnológicos, y condenara la reciente decisión del régimen chino de comunicar a distintos países una nueva normativa para limitar la exportación de estos elementos.
"Esto afecta a todos los países, sin excepción, y obviamente fue un plan ideado por ellos hace años. Es absolutamente inaudito en el comercio internacional y una vergüenza moral en el trato con otras naciones", aseguró el líder republicano, y se mostró molesto con la medida: "Es imposible creer que China hubiera tomado semejante medida, pero lo hizo, y el resto es historia", concluyó.
Los aranceles previstos por Trump elevarían los impuestos a la importación de productos chinos hasta el 130%. Eso estaría justo por debajo del nivel del 145% impuesto a principios de este año, antes de que ambos países redujeran los gravámenes en una tregua para avanzar en las negociaciones comerciales.