El exfutbolista inglés David Beckham fue nombrado caballero por el rey Carlos III en una ceremonia que se realizó este martes en el Castillo de Windsor y que, a partir de ahora, los autoriza a él y a su esposa Victoria a ser conocidos como Sir y Lady Beckham.
El copropietario del Inter Miami se arrodilló ante el monarca inglés, que tocó sus hombros con la hoja de una espada y lo nombró caballero por sus servicios al deporte y a las obras de caridad. La noticia de que se le otorgaría el título se conoció en junio, durante la lista de honores de cumpleaños del rey.
El título de caballero reconoce las contribuciones más importantes a la vida británica en distintas áreas. Es considerado uno de los honores más altos que puede otorgar el Rey, y el tratamiento de Sir es un símbolo de respeto y mérito dentro de la sociedad inglesa.
"Este es sin duda mi momento de mayor orgullo. He tenido obviamente mucha suerte en mi carrera al haber ganado lo que he ganado y hecho lo que he hecho, pero recibir un honor como este, de caballero, está más allá de cualquier cosa que alguna vez pensé que recibiría", afirmó Beckham tras la ceremonia.
"Me siento profundamente honrado y agradecido por este honor. He tenido la fortuna de representar a mi país y siempre lo he hecho con orgullo. Adoro a nuestra Familia Real y lo que significa para la gente, no solo en Gran Bretaña, sino en todo el mundo. Jamás imaginé que esto me sucedería", confesó en redes sociales.
"El fútbol me lo dio todo y también me permitió viajar desde pequeño. Viajar me abrió los ojos a los problemas que afrontan los niños en todo el mundo. He tenido la suerte de trabajar con organizaciones increíbles como UNICEF, la Royal Foundation y la King’s Foundation, que me han enseñado la importancia de apoyar a los niños, ayudarlos a desarrollar todo su potencial e inspirar a la próxima generación", agregó.
Bechkam, de 50 años, lleva dos décadas colaborando con UNICEF, el fondo de Naciones Unidas para la infancia. Por su destacada trayectoria deportiva, jugó un papel fundamental para que Londres fuera elegida como sede de los Juegos Olímpicos de 2012.
El exmediocampista jugó 115 partidos para la Selección de Inglaterra, lo que lo convierte en el tercer jugador con más presencias en el ranking histórico. Es el único futbolista inglés que anotó goles en tres Copas del Mundo diferentes e integró el plantel del Manchester United que logró el triplete de 1999, cuando ganó la Liga Premier, la Copa FA y la Champions League.