Es una práctica común la de tirar la cáscara cuando comemos una fruta o verdura. Generalmente, consideramos estos residuos del alimento como basura, aunque recientemente se reveló un truco casero que sirve para aprovechar la cáscara de zanahoria en el jardín de cualquier hogar.
Esta verdura entra dentro de la selecta lista de las que pueden tener una "segunda vida", en este caso para los amantes de la jardinería. Y es que sus nutrientes no solo permiten reciclar, sino que además mejoran nuestro jardín de manera simple y orgánica.
Para esto hay que reunir las cáscaras en un recipiente y luego preparar el suelo, es decir, un área cerca de tus plantas donde quieras mejorar el suelo. Una vez completado estos pasos, cavar un pequeño hoyo y enterrar las cáscaras. Por último, regar el área para facilitar la descomposición.
Por qué no debés tirar las cáscaras de zanahoria
Las cáscaras de zanahoria contienen muchos nutrientes que pueden favorecer nuestro suelo. En su proceso de descomposición, liberan vitaminas A, C, K y B junto a minerales como el potasio, fósforo, hierro y magnesio, entre otros esenciales que las plantas absorben fácilmente. Este proceso nutre a las plantas y además mejora la estructura del suelo, ya que lo vuelve más fértil y aireado.
Por otra parte, actúan como un fertilizante natural, debido a que ayudan a retener la humedad en el suelo. Esto es especialmente útil en climas secos o durante los meses de verano, cuando el agua es un recurso valioso.