A tomar nota: cuál es el mejor truco que reveló una experta en jardinería para trasplantar una planta sin riesgos

Tener plantas en casa es una de las formas más bonitas y naturales de decorar y de dar nueva vida a los espacios. Pero a veces olvidamos que también necesitan ciertos cuidados para seguir creciendo, más allá de regarlas o de proporcionarles abono de vez en cuanto.

Uno de esos cuidados que a veces olvidamos es el trasplante, un paso fundamental cuando la maceta se les queda pequeña o cuando la tierra ya no aporta los nutrientes que necesitan. Debes tener en cuenta que si el espacio es escaso, las raíces tienden a salir por los agujeros de la maceta (si los tiene), a sobresalir por la parte superior de la maceta o a crecer enrollándose sobre sí mismas. Además, cuando están muy apretadas, no hay una buena hidratación y una aireación suficiente.

El problema es que más allá de que no sabemos cuándo realizar ese trasplante, también nos da miedo hacerlo por si dañamos la planta. Realmente, aunque puede parecer una tarea delicada, trasplantar plantas no es complicado si sigues algunos pasos básicos como los que ha dado en sus redes sociales Natalia Sáez, una experta en plantas que tienen más de 155.000 seguidores en TikTok y más de 434.000 seguidores en Instagram.

Cómo trasplantar una planta sin ponerla en riesgo según una experta

Antes de comenzar el trasplante, Natalia Sáez explica que hay que informarse sobre la planta que deseas trasplantar, ya que no todas reaccionan de la misma forma ante el mismo. Por ejemplo, "Calatheas, espatifilos y begonias, cuanto menos toques las raíces, mejor", señala la experta.

Una vez que conocer cómo puede reaccionar la planta, el siguiente pasó será hacerse con la maceta adecuada. Para Sáez, un error muy común es pasarse con el tamaño de la maceta, cuando lo mejor que es sea una talla más grande que la anterior, no el doble. Tras elegir la maceta adecuada, hay que apostar por el sustrato correcto para cada tipo de planta.

trasplantar-planta.jpg

A la hora de realizar el trasplante, lo mejor es aflojar la maceta dándole golpes suavemente, o apretando los lados para soltar el cepellón sin romper las raíces. De hecho, contra menos toques las raíces, mejor. En muchos casos podrás trasplantar el cepellón sin tocarlo, añadiendo nuevo sustrato a los huecos que van quedando en la maceta.

En este sentido, lo mejor es no apretar el sustrato, lo aconsejable es "dar golpecitos e ir rellenando conforma vaya bajando", explica la experta. Además, recomienda poner una cama de sustrato en el fondo de la maceta, para que las raíces nunca apoyen en la base de este contenedor.

transplante.jpg

A veces, y en caso de que las raíces estén dañadas, recomienda cortarlas, y evitar regar hasta pasados dos o tres días como mínimo tras hacer el trasplante para evitar enfermedades.

Pero si no has tenido que realizar corte de raíces, puedes regar nada más acabar con el proceso. En este caso, cuando riegues tras el trasplante hazlo con aminoácidos, ya que son de mucha ayuda en momentos de estrés para la planta. A la hora de abonar, lo mejor es que esperar un par de semanas.