Las bolsas de Asia y Wall Street se derrumbaron este lunes en respuesta a los aranceles del 25% impuestos por el presidente Donald Trump a las exportaciones de China, México y Canadá, el mismo día en que el gobierno de Javier Milei dio inicio a la nueva fase del crawling peg, que pasó del 2% al 1%.
La medida de la Casa Blanca entró en vigencia el sábado y causó preocupación en los mercados, que ven la posibilidad de una guerra comercial entre países y de un aumento de la inflación en Estados Unidos. Este lunes, el Nikkei japonés perdió un 2,6%; el ASX australiano, un 1,8%; y el Kospi de Corea del Sur, un 2,5%.
La bolsa de China permanece cerrada por los festejos de Año Nuevo y retomará la actividad recién el miércoles, aunque se anticipa una reacción negativa: el gobierno de Xi Jinping anunció que tomará contramedidas para responder a la nueva política de Trump y que presentará una queja ante la Organización Mundial del Comercio.
Wall Street también registraba caídas este lunes. Los futuros del Dow Jones mermaban 1,2%; los del S&P500, un 1,6%; y los del Nasdaq, un 1,6%. A nivel global, el yuan chino, el dólar canadiense y el peso mexicano se devaluaron respecto al dólar estadounidense.
En paralelo, el ministro de Economía, Luis Caputo, dio inicio a la nueva fase del programa económico del Gobierno. El crawling peg, el mecanismo por el que se ajustan mensualmente las devaluaciones del tipo de cambio, se redujo del 2% al 1% mensual.
El esquema funciona como un ancla cambiaria y busca contener la inflación a corto plazo, ya que mantiene el tipo de cambio por debajo de su nivel de equilibrio. Al moverse a un ritmo más lento que la inflación, se espera que arrastre al resto de los precios hacia la baja.
Sin embargo, el nuevo contexto económico internacional podría comprometer la sostenibilidad a largo plazo del crawling peg, afectando la competitividad de las empresas argentinas y dificultando la acumulación de reservas.