El dólar escaló de $1235 a $1380 en julio, lo que implicó un salto de casi el 12% en un mes, y el pase a precios (pass through) en las góndolas quedo evidencia en las primeras dos semanas de agosto: los precios de los alimentos subieron un 3,1% a raíz de las alzas en carnes y bebidas, compensadas levemente por la baja de algunos productos.
Según un informe de la consultora LCG, en la segunda semana del octavo mes del año, los alimentos y bebidas relevados arrojaron un alza del 1,1% tras el aumento del 2% en la primera semana. En julio, el tipo de cambio mayorista trepó 14%.
El incremento en el precio de carnes y bebidas explicaron el 80% de la inflación semanal, la cual fue levemente compensada por la baja de productos lácteos y huevos, que cayeron alrededor de 0,5% en la comparativa contra la primera semana del mes.
Quedaron por encima del promedio semanal las frutas, que tuvieron un salto del 4,2%; las bebidas e infusiones para consumir en el hogar (+2,2%); las carnes (+1,7%); los aceites (+1,5%); y el azúcar, miel, dulce y cacao (+1,3%). En el otro extremo, las comidas listas para llevar retrocedieron un 0,7%.
"Los primeros datos de nuestro relevamiento de precios de alimentos de agosto muestran una marcada aceleración de las subas, pero habrá que confirmarlo con el correr de las semanas (los aumentos suelen concentrarse a principios de mes y se moderan sensiblemente después)", señaló LCG.
"No obstante, no descartamos que las subas y bajas del tipo de cambio de finales de julio y principios de agosto terminen teniendo impacto en precios minoristas, pero entendemos que el traslado sería menor y más rezagado en el tiempo", agregóel reporte.