Ramos Mejía: velan los restos del kiosquero y la familia pidió "no politizar" el caso

Quebrado por el dolor, el padre de Roberto Sabo dijo que "la gente lo está recordando con cariño, siempre lo tienen presente".

Los restos de Roberto Sabo, el kiosquero que fue asesinado a balazos el domingo por una pareja de delincuentes mientras trabajaba en Ramos Mejía, comenzaron a ser velados esta tarde en Morón y serán inhumados el miércoles a la mañana. La familia de la víctima pidió "no politizar" el caso.

"La gente en este momento lo está recordando con cariño, siempre lo tienen presente", expresó Pedro Sabo, el padre de la víctima, acompañado de los hijos de sus nietos, Tomás y Nicolás. Todos ellos pidieron ante la prensa "no politizar" el caso.

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"Dicen que van a poner un santuario frente al kiosco y no estaría mal porque hace cuarenta años que estamos en la cuadra”, contó el padre, que el lunes se reunió con el ministro de Seguridad de Provincia, Sergio Berni, al que le pidieron "seguridad en el comercio" y en el barrio.

El cuerpo de la víctima fue entregado a la familia luego de la autopsia correspondiente, la cual indicó que el kiosquero, recibió cuatro disparos a través de un arma calibre 22 en la zona del tórax, lo que le produjo la muerte instantánea.

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