Un abuelo de 89 años fue brutalmente golpeado dentro de un geriátrico, en un hecho que quedó registrado por cámaras de seguridad y generó indignación en redes sociales. La dueña del hogar nunca pidió disculpas y justificó su accionar.
La familia se dio cuenta de lo ocurrido al ver a la víctima con moretones en la cara y una fractura. Ante este hecho, pidieron ver las cámaras de seguridad, donde constataron el ataque al adulto mayor.
Un abuelo de 89 años fue brutalmente golpeado dentro de un geriátrico, en un hecho que quedó registrado por cámaras de seguridad y generó indignación en redes sociales. La dueña del hogar nunca pidió disculpas y justificó su accionar.
La víctima, identificada como Héctor, padece Alzheimer y presenta una importante disminución auditiva y visual. Según denunció su familia, fue agredido por un grupo de cuidadoras, encabezado por la dueña del lugar, y como consecuencia sufrió múltiples lesiones, entre ellas la fractura de una mano.
El caso salió a la luz luego de que sus nietas, Andrea y Karen, lo visitaran el 9 de diciembre y lo encontraran con el rostro visiblemente lastimado. "Nos presentamos a visitarlo como lo hacíamos de costumbre y nos encontramos con mi abuelo con toda la cara golpeada", relató Andrea en diálogo con C5N. Al consultar qué había ocurrido, la dueña del geriátrico les dijo que el hombre había tenido "un brote psicótico" porque no quería tomar la medicación, una explicación que no convenció a la familia.
Ante las dudas, las nietas exigieron ver las cámaras de seguridad. "Al principio negaron mostrarlas. Después de insistir, ella nos las mostró desde su celular, pero no se veía bien. Decidimos pasarle el video a un familiar, le hizo zoom y ahí se ve claramente cómo le pega golpes de puño", explicó Karen.
En el video también se observa que otros adultos mayores permanecen inmóviles mientras ocurre la golpiza, un dato que para la familia refuerza la sospecha de que no se trataba de un hecho aislado. "No es la primera vez. Ya nos había pasado de ir a verlo y encontrarlo golpeado, y nos decían que se había caído", sostuvo Andrea. La propia víctima, al ser consultada por sus familiares, llegó a decirles: "La ligué yo".
Las nietas contaron que, por temor a represalias, primero retiraron a sus abuelos del lugar, ya que también se encontraba internada allí la esposa de Héctor, y recién después realizaron la denuncia. "Decidimos denunciar una vez que ellos ya no estaban ahí", señalaron. La causa fue ampliada y las imágenes fueron aportadas a la Justicia.
Tras la difusión del caso, familiares de otros residentes del geriátrico se comunicaron con Andrea y Karen para aportar testimonios. Respecto a la actitud de la dueña del establecimiento, las jóvenes aseguraron que nunca hubo un pedido de disculpas.
"En ningún momento pidió perdón. Dijo que le pegó porque mi abuelo tuvo un brote y que se defendió porque él la rasguñó", explicaron. Sin embargo, la familia sostiene que en el video se observa que la agresión fue iniciada por ella. "Ella lo agarra del pelo, le pega piñas. Mi abuelo en algún momento manotea para defenderse, es lógico", remarcaron.
Actualmente, el geriátrico se encuentra clausurado, aunque algunos adultos mayores permanecían allí a la espera de que sus familias los retiren. Héctor, en tanto, se encuentra fuera de peligro. "Por suerte está bien", confirmaron sus nietas, quienes aseguraron que continuarán impulsando la causa y para evitar que hechos similares vuelvan a repetirse.