La mala acentuación o una letra demás en una palabra puede cambiar por completo su significado o el sentido de una frase. A pesar de que los errores de ortografía siempre pueden presentarse, lo mejor es evitar estas fallas y escribir adecuadamente.
La mala acentuación o una letra demás en una palabra puede cambiar por completo su significado o el sentido de una frase. A pesar de que los errores de ortografía siempre pueden presentarse, lo mejor es evitar estas fallas y escribir adecuadamente.
La técnica para diferenciar si es correcto o no un vocablo confuso es buscar el significado de ese término y así poder escribirlo correctamente.
Debido a que el idioma español es demasiado amplio, muchas veces se nos puede hacer difícil saber qué quieren decir ciertos términos, así como también escribirlos de manera correcta. En esos casos, siempre es bueno recurrir al diccionario de la Real Academia Española (RAE).
En el caso específico del vocablo que hace referencia a que un objeto puede incendiarse con gran facilidad, algunas personas confunden el término adecuado para tal acción, entre “flamable” o “inflamable”, y, al no utilizar la palabra correcta, puede ocasionar, no solo una falta de ortografía, sino que también provocaría un riesgo en caso de emergencias.
Según la Real Academia Española, explica que en el cultismo de origen latino inflamable se reconocen, además de la raíz flama, otros dos componentes “in y ble”, para formar adjetivos que expresan la posibilidad de recibir la acción de verbo del que derivan.
Por lo tanto, el adjetivo “inflamable” podría referirse tanto a hinchazón como a algo que puede arder con facilidad, y en español el verbo “flamar” de “flamable” no existe, no es una palabra que se deba emplear, ya que no es correcta.
Algunos ejemplos de cómo se utiliza el verbo correctamente:
Los dos vocablos son idénticos pero con significados diferentes, y es correcto usarlos evidentemente dependiendo de la situación y el contexto.