Corrientes sigue en vilo por las fuertes inundaciones que azotaron a la localidad de San Luis del Palmar y dejaron como saldo más de 400 personas evacuadas. Además, otras 100 decidieron dejar sus viviendas de forma autónoma.
Las lluvias causaron un desastre en la zona del San Luis del Palmar, donde ya se confirmó que hay más de 400 personas evacuadas distribuidos en 13 centros.
Corrientes sigue en vilo por las fuertes inundaciones que azotaron a la localidad de San Luis del Palmar y dejaron como saldo más de 400 personas evacuadas. Además, otras 100 decidieron dejar sus viviendas de forma autónoma.
El ministro de Desarrollo Social de la región, José Irigoyen, recorrió la localidad junto al gobernador Juan Pablo Valdés, el ministro secretario general de la Gobernación, Juan Pablo Fornaroli, y equipos del Ministerio de Desarrollo Social, además del intendente Néstor “Reni” Buján. En ese contexto, se confirmó la habilitación de un nuevo centro de evacuados, con lo que el total asciende a 13 espacios destinados a albergar a las personas afectadas.
Asimismo, precisó que la cantidad de evacuados supera las 420 personas, mientras que los autoevacuados ya son más de 100. Los funcionarios destacaron la rapidez y el gran trabajo para asistir a los damnificados, aunque señalaron que debido a la gravedad, ya son 13 los centros habilitados para las familias evacuadas.
En relación con la evolución de la emergencia, el funcionario explicó que los informes indican que el nivel del agua podría mantenerse o incluso seguir en ascenso, ya que aún no se alcanzó el pico. En ese sentido, advirtió que se esperan nuevas precipitaciones en las próximas horas.
Irigoyen indicó además que unas 360 mil hectáreas inundables drenan hacia el Riachuelo y subrayó la magnitud de las lluvias registradas: “En cualquier ciudad del mundo es difícil soportar 600 milímetros de agua en pocos días”.
Por último, señaló que la situación también es compleja en Empedrado, Derqui, El Sombrero y Riachuelo, además de numerosos parajes rurales. Algunos de ellos continúan incomunicados, con especial preocupación en San Luis del Palmar.
"Mi casa está a media cuadra del río y está como ves, que tengo la mitad de agua en mi casa. En un día perdí mueble, perdí la cama, perdí el colchón... Es una tristeza enorme para mí, tengo a mi nene autoevacuado", contó Alejandra, una de las damnificadas con Mariano Onega desde el lugar de las inundaciones.