A lo largo de más de dos décadas de carrera, Lali Espósito pasó de ser un rostro asociado a ficciones juveniles como Casi Ángeles a convertirse en una de las artistas pop más reconocidas de Latinoamérica. Hoy, con 32 años, su transformación no solo es estética, sino también emocional, reflejo de un camino recorrido con terapia, autocrítica y nuevos vínculos.
En sus veintes, la imagen de Lali estaba marcada por un look más aniñado: cabello largo con reflejos dorados, maquillaje suave y un estilo que combinaba lo informal con tendencias pop. Con el paso de los años, apostó por cambios más jugados: cortes de pelo en distintas longitudes, colores intensos, delineados marcados y vestuarios que reflejan mayor seguridad escénica y una identidad artística definida.
Más allá de los cambios externos, la propia artista reconoció que su verdadera transformación se dio por dentro. Al cumplir 30, vivió un proceso de introspección que la llevó a trabajar en terapia aspectos personales y profesionales. Este recorrido le permitió mostrarse más madura, pero sin perder el carisma que la caracteriza.
Lali antes
Más allá de la exposición, Lali defiende su vida privada y decide qué aspectos personales mostrar al público.
@lali
Lali contó cómo comenzó su relación con Pedro Rosemblat
Durante su visita a Cortá por Lozano (Telefe) en junio de este año, Lali habló abiertamente sobre el inicio de su vínculo con el periodista Pedro Rosemblat, con quien mantiene una relación desde hace más de un año. Según relató, todo comenzó con “cruces en el algoritmo” que le mostraban videos y contenidos del conductor. La primera impresión fue decisiva: “qué buen mozo, qué inteligente”, recordó entre risas.
Aunque no hubo un seguimiento mutuo inmediato, el interés creció gracias a amistades en común que facilitaron el acercamiento. “No lo seguía directamente, pero sí un tiempito antes de conocernos”, explicó. Con el tiempo, coincidieron en un evento y nació el vínculo que hoy sostienen.
La panelista Juariu, conocida por anticipar romances en redes, fue quien detectó el primer like que confirmaba la química entre ambos. Lali Espósito valoró el respeto con que manejaron la información, destacando que, pese a ser una figura pública, cuida especialmente su vida privada y decide qué compartir.
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La artista confesó que la primera impresión sobre Pedro Rosemblat fue marcada por su inteligencia y carisma.
Durante la charla, la cantante profundizó sobre el cambio que vivió al cumplir 30, al que describió no solo como una cuestión de edad, sino como un proceso interno guiado por la terapia y la conciencia sobre sus virtudes y defectos. El encuentro con el amor y una nueva etapa profesional terminaron de consolidar esa evolución personal que hoy proyecta.