La expectativa es baja pero la información es mucha. Esa es la sensación que por estas horas se instaló en los tribunales federales de Comodoro Py 2002, en la Ciudad de Buenos Aires. Ocurre que el viernes se produjo la apertura del teléfono celular de Daniel María Garbellini, echado de la Agencia Nacional de la Discapacidad (Andis), junto a su extitular Diego Spagnuolo, luego de que se filtrara el audio de las presuntas coimas. El contenido de dispositivo no llegó aún manos de los investigadores: es tanta la información que deberán ir a buscarla este lunes con un disco externo.
La expectativa, sin embargo, es baja porque el teléfono fue secuestrado el viernes 22 de agosto, mientras que los audios de las coimas, en los que aparecía mencionado Garbellini, se conocieron el martes 19 de ese mes. Hubo tiempo de acomodar, creen los investigadores. Tiempo de sobra si se considera, además, que el caso de los supuestos sobornos de la droguería Suizo Argentina, a través de Andis, habían sido denunciados por primera vez hacia más de un año. El elemento restante, que hace que la expectativa sea baja, es que el propio Garbellini entregó la clave de desbloqueo. Fue el único de los investigados que lo hizo.
Daniel María Garbellini era, hasta el mes pasado, director de Acceso a los Servicios de Salud, lugar desde el que administraba el programa Incluir Salud, que brinda cobertura médica a las personas con discapacidad que no tienen otra obra social. “La caja”, le llaman los que conocen el organismo por dentro. Una caja que, además, el oficialismo se encargó de robustecer a fuerza de dejar fuera del sistema a personas con discapacidad que necesitaban la asistencia del Estado. ¿Cómo lo hizo? Pidiendo siempre un documento más o una prueba más de la denunciada discapacidad, de modo que el trámite se conviviera en una historia de nunca acabar. O mandando cartas a domicilios incorrectos de modo que nunca llegaran a las personas a las que se debía contactar. La crueldad de la crueldad.
Los trabajadores activos de Andis cuentan, además, que la gestión Spagnuolo (que no es otra que la gestión Milei) ofrecía premios para quien lograra la baja de la mayor cantidad de pensiones por discapacidad: se pagaban en horas extra y con posibilidad de hacer home office.
Más allá de los teléfonos celulares secuestrador en el expediente, la causa avanza por estas horas en el análisis de la prueba documental. Para eso el fiscal federal Franco Picardi convocó a la Procuraduría de Investigaciones Administrativas. Aunque la causa permanece bajo secreto de sumario, este medio pudo saber -de fuentes externas a la investigación pero que ofrecieron información- que hay una pista firme pone en evidencia posibles manejos vinculados a la droguería Suizo Argentina: en distintas provincias y municipios se detectó que en la medida que el oficialismo cerró acuerdos con la Libertad Avanza se incrementaron las compras del Estado a la ya proveedora droguería Suizo Argentina. El primer caso en sugerir esa posibilidad se dio en Chaco. En los últimos días aparecieron pistas firmes en municipios de la la provincia de Buenos Aires cuyo intendentes pasaron de los globos amarillos a buzo canguro violeta.
El detalle que ofrece esa pista es que si se revisan los diarios digitales en las fechas en las que los oficialismos locales cerraron acuerdos con La Libertad Avanza siempre aparecen los mismos protagonistas en las fotos: por el mileismo está la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y/o su subalterno Eduardo “Lule” Menem. Justamente los dos mencionados por Spagnuolo en las charlas de café en las que fue grabado de manera subrepticia.
Mientras avanza la causa de las presuntas coimas, Comodoro Py ofrece un respiro al oficialismo en el caso $LIBRA en el que se investiga si el presidente Javier Milei fue parte de una estafa con criptoactivos y si cobró para recibir al criptoempresario Hyden Mark Davis, presentarlo en sociedad con un posteo en su cuenta de X y finalmente difundir su criptoemprendimiento en redes sociales. Los alcances de esa causa aún son desconocidos pero junto al Presidente ya se encuentra imputada su hermana Karina.
Donde cambió la suerte del Presidente en relación al caso LIBRA fue en el Congreso Nacional. La comisión investigadora logró organizarse y darse autoridades. Se anunció que pronto será convocada la secretaria general de la presidencia y se establecían por reglamento que podrá solicitarse la colaboración de la justicia y las fuerzas de seguridad para el caso de que los convocados no se presenten.
Inquieto, el titular de la comisión investigadora, el lilito Maximiliano Ferraro, informó el viernes último que convocó a la comisión para el próximo martes a las 16 Y le envió al Presidente un pliego de preguntas que tiene tiempo de responder hasta el 12 de septiembre.
“Se citaron a las primeras cuatro personas para brindar declaración testimonial, entre ellas el titular de la Oficina Anticorrupción, Alejandro Melik, quién se negó a recibirla y el oficial notificador debió fijar copia en la puerta”, detalló en sus redes sociales. Junto a la copia podrían haber colocado un cartel que dijera “acorralado”.