Un partido de baseball infantil que se disputaba en North Charleston, Carolina del Sur, Estados Unidos, fue interrumpido por un tiroteo que se desató en un estacionamiento cercano. Un padre que estaba filmando el encuentro registró el sonido de los disparos y el momento en que los chicos se tiran al piso para protegerse.
El hecho ocurrió el lunes por la noche en el predio del parque Pepperhill. Los testigos le contaron a la Policía que un grupo de adolescentes llegó al estacionamiento, justo al lado de la cancha, y empezaron a pelearse. Después comenzaron a dispararse, se subieron a varios autos y continuaron con el tiroteo mientras huían del lugar.
Blake Ferguson había ido al campo para acompañar a su hijo y estaba filmando el partido cuando comenzaron los tiros. Afirmó que escuchó "entre 50 y 75 disparos" y que le pareció que venían del estacionamiento. No se reportaron heridos, pero varios autos recibieron impactos de bala.
La Policía de North Charleston prometió hacer todo lo que esté en su poder para localizar y arrestar a los jóvenes involucrados en el incidente, al que un vocero calificó de "atroz e irresponsable". No se reportaron heridos.