La visita de Racing a Gimnasia, por la cuarta fecha de la Liga Profesional 2022, quedó envuelta en una enorme polémica por un penal no sancionado a la Academia mientras el VAR no funcionaba. Para el árbitro Yael Falcón Pérez no fue, pero la repetición de la transmisión televisiva mostró lo contrario.
En el inicio del segundo tiempo, el juez le avisó a los capitanes que había perdido la comunicación con la cabina del VAR y que el encuentro iba a continuar sin la intervención tecnológica. Unos minutos más tarde, se produjo la controversial jugada.
Enzo Copetti picó de cara al arco tras un pase en profundidad y, cuando pisó el área, fue tocado desde atrás por Oscar Piris. El árbitro entendió que el delantero de la Academia fingió el contacto y por eso no cobró la pena máxima.
Con el VAR en funcionamiento, la acción hubiera sido revisada y seguramente Falcón Pérez iba a ser llamado para ver lo sucedido en el monitor que se encuentra junto al campo de juego. Pero al no tener conexión con Ezeiza, esto no sucedió.