A fines de 2021, varios videos de TikTok mostraban el avance de las tropas rusas en el límite con Ucrania y los rumores de un conflicto bélico comenzaban a circular.
A fines de 2021, varios videos de TikTok mostraban el avance de las tropas rusas en el límite con Ucrania y los rumores de un conflicto bélico comenzaban a circular.
Diversos sucesos acompañan desde la tecnología y las plataformas lo que sucede en la guerra entre Rusia y Ucrania: militares tiktokers, recaudación vía criptomonedas, hackers, robótica IA, censura de las redes sociales y fake news. ¿Cómo está respondiendo la tecnología en este contexto de guerra?
No resulta raro que el primer golpe en el conflicto se haya tratado de un ataque cibernético contra el gobierno ucraniano. Luego del inicio de la guerra, los hasthag #NoALaGuerra y #WW3 llegaron a los 7 mil millones de visitas en pocos días.
Con el pasar de las semanas vimos una nueva forma de transmitir la guerra, de manera directa y en primera persona. Las Fuerzas Armadas, por ejemplo, comenzaron una búsqueda por penetrar en las redes sociales para aumentar su popularidad en las generaciones más jóvenes.
Las fake news tomaron un protagonismo central. Muchas de las noticias sobre la guerra que circularon en redes sociales gozaron de gran popularidad pero pocas veces fueron desmentidas. Las grandes empresas tecnológicas, conocidas como bigtechs, se dividieron entre el apoyo moral y el efecto económico.
La "ciberguerra" incluye a hackers, hacktivistas y nuevos sistemas de información. Cuando estalló la guerra, el Gobierno ucraniano comenzó a pedir donaciones en criptomonedas como Bitcoin y Ethereum. Gran parte fue destinada a las tropas de hackers que protegen las blockchains y otra para los refugiados sin acceso a sus cuentas bancarias.
Nos encontramos con la primera guerra en línea de impacto mundial. Estamos siendo testigos de una gran participación de la tecnología que acompaña pero también modifica.