Triple femicidio en Florencio Varela: decretaron el secreto de sumario tras las declaraciones de Lázaro Sotacuro y Florencia Ibáñez

Así lo decidió la Justicia, en el marco de la investigación por los asesinatos de Lara Gutiérrez, Brenda del Castillo y Morena Verdi. El hombre es uno de los detenidos por ser el dueño del vehículo que, según los investigadores, sirvió de apoyo a la camioneta en la que se trasladaron. La mujer, por su parte, es su sobrina y también está señalada.

La periodista Mariela López Brown informó en el móvil desde La Matanza de De Una, por C5N, que Sotacuro e Ibáñez fueron trasladados a distintas unidades penitenciarias luego de que declararan frente al titular de la UFI de Homicidios del partido mencionado. Además, expuso que se decretó el secreto de sumario, una medida que limita el acceso a la información del expediente.

En tanto, el abogado de ambos, Guillermo Endi, dialogó con la prensa y destacó las exposiciones de los acusados: "Las declaraciones fueron excelentes. Están bien de ánimo. Sotacuro está con un poco más de miedo que Florencia porque ve la aparatología criminal, que lo sobrepasó".

También se refirió a la herida de Sotacuro y expuso los próximos pasos judiciales. "Pediremos que sea trasladado. Si tiene que declarar dentro de unos días, es mejor que esté más cerca. La lastimadura no es una mordedura, voy a hacer una pericia con un veterinario y un médico clínico. Le pegó la Policía en La Quiaca. Son heridas de las esposas y tiene la mano inflada", marcó.

Morena Verdi Brenda del Castillo Lara Morena Gutiérrez triple crimen florencio varela femicidio

Según la investigación, Ibáñez se trasladó en el Volkswagen Fox de Sotacuro, identificado en cámaras de seguridad como el vehículo que habría brindado apoyo a la Chevrolet Tracker utilizada para transportar a del Castillo, Verdi y Gutiérrez.

Por su parte, el hombre de 41 años fue trasladado sobre el mediodía del sábado a una unidad de máxima seguridad, luego de su captura el jueves por la tarde en la ciudad boliviana de Villazón y su posterior entrega a las autoridades argentinas.

Sotacuro estaba alojado en La Quiaca y trasladado al penal de Gorriti, en San Salvador de Jujuy. El operativo de captura se realizó en una hostería cercana al puente internacional, en un trabajo conjunto entre la Brigada de Investigaciones de La Quiaca y las fuerzas de seguridad de Bolivia.

El hombre fue sorprendido en un hospedaje llamado Hostal Villazón. De allí fue trasladado, alrededor de las 3 del viernes, a dependencias policiales para su resguardo y, luego de los trámites de extradición, personal de Interpol lo llevará hacia La Quiaca, donde quedó alojado en una dependencia de la Policía Federal Argentina (PFA).

Triple femicidio en Florencio Varela: la hipótesis del fiscal

Mientras avanza la investigación del triple femicidio en Florencio Varela, el fiscal Adrián Arribas, de la UFI de Homicidios de La Matanza, elaboró la hipótesis de la causa que implica en el crimen a cuatro de los siete detenidos y a dos de los prófugos: Pequeño Jota y Matías Ozorio, su presunto ladero.

El funcionario, en un documento publicado por TN, estableció que entre el 19 de septiembre a las 22:30 y el 23 de septiembre a las 18, "un número indeterminado de sujetos, de distinto sexo, entre los que se encontraban Maximiliano Andrés Parra, Daniela Iara Ibarra, Miguel Ángel Villanueva Silva, Celeste Magalí González Guerrero, Julio Valverde y/o Montana y/o Pequeño Jota y Matías Agustín Ozorio", tomaron parte en el asesinato.

"Actuando con división de roles, en el interior del domicilio ubicado en la calle Chañar 702, Villa Vatteone, partido de Florencio Varela, y con claras intenciones de causarles la muerte, aplicaron múltiples golpes de puño, patadas y diversos cortes utilizando armas blancas sobre la superficie corporal de la humanidad de Morena Verdi, Brenda Loreley del Castillo y Lara Morena Gutiérrez", añade el texto.

Estos ataques les ocasionaron "lesiones de tal magnitud que provocaron su deceso; ello, obrando a traición y sobre seguro, aumentando intencionalmente y de manera inhumana el sufrimiento al causar padecimientos innecesarios que van más allá de lo necesario para cometer el acto, concurso premeditado de todos ellos y aprovechando los masculinos su condición biológica dominante de género al ejercer violencia de género sobre las víctimas mujeres; acto seguido y con fines de lograr su impunidad enterraron a las víctimas en el patio del citado domicilio, dándose a la fuga del lugar".

"Asimismo, como hipótesis accesoria, Iara Daniela Ibarra y Maximiliano Andrés Parra ayudaron a Celeste Magalí González Guerrero a eludir el accionar de la Justicia al constituirse en el domicilio citado, alterar y hacer desaparecer rastros, pruebas o instrumentos del delito, al limpiar y modificar la escena del crimen a sabiendas de la participación previa de Celeste Magalí González Guerrero en la comisión de un delito precedente especialmente grave", plantea el documento.

TEMAS RELACIONADOS