El rugbier baleado por oficiales de la Policía Bonaerense, Tomás Krüger, fue intervenido en un brazo y se espera la llegada de una prótesis para un pie mientras se encuentra internado en Moreno. Sus compañeros del club Mariano Moreno se acercaron al establecimiento para acompañar a su familia y expresaron en El Diario su preocupación por la salud de su amigo.
"Estamos todos preocupados porque está grave, más que nada por el tema del brazo. No sabemos si va a volver a jugar y si puede volver a su carrera, que estudia el profesorado de Educación Física", detalló Santiago, quien conoce a Tomás desde hace ocho años.
Hay cinco semáforos hasta su casa, dos funcionan, y tres se ponen amarillos por precaución porque la zona es peligrosa y pueden robar. Hay cinco semáforos hasta su casa, dos funcionan, y tres se ponen amarillos por precaución porque la zona es peligrosa y pueden robar.
El jugador de rugby aseguró que Tomás es muy apreciado por sus compañeros: "El Gordo es muy querido en el club. Siempre te saca una sonrisa con los chistes que hace, es una gran persona y te alegra el día. Por eso estamos tristes por lo que le pasó".
Santiago relató lo que sucedió en la noche del sábado, luego que su equipo se enfrentara con Curupaytí: "Siempre compartimos con el otro club y esa noche fue con los chicos de Curupaytí. Estábamos compartiendo una bondiola y Tomás se fue a la casa a buscar algo y pasó esto".
La Policía nunca se identificó, tenía todas las luces apagadas. La Policía nunca se identificó, tenía todas las luces apagadas.