Con más de 16 mil hectáreas incendiadas en las sierras de Córdoba, el fuego no da tregua en la provincia y pese a que el viento disminuyó su intensidad durante la noche de este domingo, los lugareños de la localidad de San Marcos Sierras viven momentos de mucha tensión y drama.
Actualmente, hay cuatro focos activos, pero el arduo trabajo de los bomberos fue determinante para contener el avance del siniestro. Por esta situación, en las últimas horas más de 400 turistas debieron ser evacuados del cerro Champaquí, producto del procedimiento que se desarrolla alrededor de Villa Berna, en el valle de Calamuchita.
Por su parte, al menos cuatro barrios de la localidad de San Marco Sierra tuvieron que ser evacuados, ya que en el lugar es donde se encuentra uno de los focos más importantes de la Provincia. En las primeras horas de este lunes, el viento está calmo, pero preocupa que en caso de que se reactive, reavive las zonas que están quemadas. De igual modo, la alerta de riesgo sigue siendo extrema.
En el lugar, se mantiene una guardia de ceniza para intervenir rápidamente y evitar el avance del fuego. “Esperamos que no haya viento para que no se vuelva a prender el fuego. Estamos en la expectativa de eso. Anoche, con mucho viento, en tan solo media hora se reavivó el fuego. Pero esta mañana, por el momento está controlado”, reveló uno de los vecinos en diálogo con Bernardo Mangago por C5N.
Embed - FUEGO sin control en CÓRDOBA: el DRAMA de los lugareños por PERDERLO TODO
El drama de los lugareños que perdieron todo por el fuego en Córdoba
Capilla del Monte, Salsacate, Villa Berna, Los Cocos, fueron algunos de los puntos geográficos que esta semana sufrieron el poder destructivo de las llamas.
Para las primeras horas de esta semana, los pronósticos indican como aspecto favorable un leve descenso de las marcas térmicas, con mínimas de 10°C y máximas de 24°C, y un aumento, aunque también leve, de la humedad relativa ambiente del 54%. Si bien, en los últimos días llovió en algunos puntos de la provincia, estas fueron escasas.
Algunos vecinos participan de las tareas como brigadistas, pero también tienen en riesgo sus viviendas. “Mi casa aún no se incendió y todo esto se debe al trabajo de los bomberos civiles que pudieron tirar agua y apagar el fuego, pero esto se ha ido fuera de control”, relató Manuel, un brigadista.
“Esto claramente fue intencional. Los fuegos son políticos, desde la parte alta del poder político no invierte, se hace una desinversión. Los aviones de los bomberos son avioncitos a la escala de los montes que tenemos acá”, lamentó.
Por otro lado, en el recorrido del lugar con C5N, Manuel mostró cómo quedó su vivero bajo fuego: “Mucho trabajo y esfuerzo, pero quedó todo quemado. Perdí todos los animales: mi socio tenía chanchos, perdió todo y también perdió la casa. Yo soy agricultor y perdí colmenas”.
“Desde el 2020, todos los años tenemos un incendio de gran magnitud donde muchos vecinos se ven perjudicados. Ya hemos perdido amigos, vecinos, papá”, sostuvo Manuel.