Fernando Cáceres declaró que su esposa se suicidó, pero continúa la investigación

El exfutbolista habló con las autoridades una vez que llegaron a la casa y hallaron el cuerpo, aunque su versión no fue convincente. Ya se conocieron los resultados preliminares de la autopsia.

Ya se conocieron los resultados preliminares de la autopsia a Raquel Candía, la esposa de Fernando Cáceres que murió tras caer del séptimo piso de un edificio de la localidad de Ramos Mejía. De acuerdo con ellos, se reveló que no hubo signos de violencia previa a la caída.

En principio, la mujer cayó al patio interno del inmueble, pero testigos señalaron que en las últimas horas se escucharon gritos. Además, al entrar al departamento, los oficiales encontraron el hogar totalmente desordenado.

De acuerdo con información policial, los oficiales llegaron a la casa y vieron al exfutbolista acostado en su cama. Tras interrogarlo de forma superficial, Cáceres declaró que su esposa se suicidó, una versión que no sonó muy convincente.

Además de la falta de violencia previa a la caída, la autopsia informó que el cuerpo de Candía sufrió “lesiones y fracturas producto de la caída” a la vez que se estableció que “no tiene lesiones compatibles con agresiones previa a la caída”.

El caso lo investiga el fiscal de La Matanza Carlos Arribas, quien trabaja en la declaración al "Negro" Cáceres, ya que era la única persona que se encontraba con la mujer al momento de su muerte.

El intento de robo que sufrió Cáceres en 2009

El ex jugador de Argentinos Juniors, River y Boca, entre otros equipos, se desplaza en silla de ruedas desde hace más de 15 años, luego de un ataque a tiros que sufrió en un intento de robo el 1 de noviembre de 2009.

En aquella oportunidad, el ex defensor circulaba a bordo de su automóvil y al llegar al cruce de las calles Gaona y Falucho, en Ciudadela, fue interceptado por cuatro delincuentes armados que se movilizaban en dos Fiat Siena robados, en uno de los cuáles llevaban secuestrado a un remisero.

Cuando Cáceres quiso dar marcha atrás para esquivar a los ladrones, uno de ellos disparó a través del parabrisas y le dio en la cabeza. El ex futbolista quedó en gravísimo estado y perdió el ojo derecho, pero el además el proyectil le quedó alojado en el cerebro.

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