La Boleta Única de Papel fue aprobada en Diputados con los cambios realizados hace dos semanas en la Cámara alta con 143 votos afirmativos, 87 en contra y 5 abstenciones. Unión por la Patria se opuso al cambio en las boletas –a excepción de Guillermo Snopek-, mientras que el resto de la oposición votó junto con el oficialismo y sus aliados. La izquierda se abstuvo.
El proyecto, que propone que toda la oferta electoral se muestra en una misma papeleta- había obtenido media sanción de Diputados a mediados de 2022, impulsada por los bloques opositores de ese entonces, mientras que el Frente de Todos (ahora Unión por la Patria), votó en contra.
El pasado 12 de septiembre el Senado aprobó el proyecto, al que previamente sometió a modificaciones. Además de cambiar el modelo de las boletas –en la versión de hace dos años se impulsaba el utilizado en Córdoba y ahora se implementará el de Mendoza-, la Cámara Alta eliminó la opción de votar “lista completa”. La propuesta fue de la senadora rionegrina, Mónica Silva, quien pretendía “preservar la igualdad de condiciones entre los partidos provinciales y nacionales”.
Desde Unión por la Patria expresaron su descontento con la modificación con la nueva herramienta que se implementará en la próxima elección. El bloque mayoritario explicó que “el sistema electoral funciona”, ya que “no hay denuncias serias de fraude desde 1983 a la fecha”. Además, se refirieron en reiteradas oportunidades a la alternancia que hubo en la Argentina y a la confianza que tiene el electorado sobre los resultados.
Por su parte, el oficialismo, sus aliados y la oposición dialoguista, arremetieron contra UxP en sus discursos. “Me encontré con la sorpresa de las objeciones del kirchnerismo, pero sobre todo la falta de fundamentos para explicar lo inexplicable”, disparó en su alocución Nicolás Mayoráz (Santa Fe- La Libertad Avanza).
El santafecino agregó que La Libertad Avanza “puso su granito de arena al destrabar en el Senado esta ley, y gracias al trabajo de los senadores de La Libertad Avanza y de los funcionarios de la Jefatura de Gabinete y la fuerza que le ha puesto a este tema el presidente Javier Mieli, hoy vamos a tener ley”.
En el PRO también se hicieron eco del triunfo, ya que en varios discursos ponderaron ser impulsores de la iniciativa en el 2007. “Casi 17 años que esperamos que llegue este día. Esta historia es tan larga y este día tan especial que vale la pena recordar cómo llegamos hasta acá todos los argentinos”, expresó Silvia Lospennato. La legisladora acusó al kirchnerismo de obstruir el proyecto durante estos años: “Les preocupa porque disminuye el peso del dinero en la contienda electoral”, manifestó.
Un proyecto para incorporar la lista completa
La modificación incorporada en el Senado, que elimina la opción de votar la lista completa, fue la que logró destrabar la ley en la Cámara alta gracias al acuerdo con los bloques provinciales. Sin embargo, en Diputados no tiene amplio consenso. Hasta antes de la reunión de labor parlamentaria, había intención de parte de los bloques de la UCR y Encuentro Federal para intentar “abrir” la votación y cambiar ese artículo. Pero en un acuerdo con las cúpulas, La Libertad Avanza logró bloquear esa alternativa para que se vote en general y en particular sin la opción de debatir el articulado.
Dado este escenario, Karina Banfi -una de las promotoras de la vuelta del botón de lista completa- anunció en su discurso que presentará un proyecto para volver a incorporarlo luego de que la ley sea promulgada. “Nos quedamos con desazón sobre el casillero de lista completa”, mencionó la diputada radical.
“Voy a trabajar intensamente para que le den rápido tratamiento”, agregó Banfi al tiempo que pidió “no buscar ventajas con el ‘cortoplacismo’” porque “estamos cambiando solo una herramienta y tiene que tener la expresión del electorado”.
Lo mismo propuso la diputada Ana Carla Carrizo y más tarde, Juan Brügge y Margarita Solbizer anunciaron su adhesión a las iniciativas cuando sean presentadas. En caso de que esto suceda, es probable que también se cuente con el voto favorable del peronismo –a pesar de haber rechazado el proyecto de Boleta Única-. El debate se dará en torno al “efecto arrastre” de los partidos con representación nacional, en detrimento de los partidos provinciales.