Olena Kushnir, sargenta mayor y médica de la Guardia Nacional ucraniana, murió este domingo de Pascua en un enfrentamiento con las fuerzas rusas. Era una de las 100 mujeres que se alistó voluntariamente para defender la ciudad de Mariúpol.
Olena Kushnir, sargenta mayor y médica de la Guardia Nacional ucraniana, murió este domingo de Pascua en un enfrentamiento con las fuerzas rusas. Era una de las 100 mujeres que se alistó voluntariamente para defender la ciudad de Mariúpol.
Su fallecimiento representó un duro golpe moral para Kiev. Olena se había transformado en símbolo de la resistencia. Durante los últimos días permaneció en el frente de batalla prácticamente sin agua, alimento ni la garantía de supervivencia.
Kushnir combatió y atendió heridos hasta el final. Cuando las batallas en las calles de la ciudad sobre el Mar de Azov se volvieron más feroces, logró poner a salvo a su hijo pequeño a través de uno de los pocos corredores humanitarios que funcionaron.
Durante los primeros días de la invasión rusa perdió a su marido. A sus amigas les decía que quería "sacudir Occidente" para que el resto de Europa reaccionara durante la guerra. Defender Mariúpol era su única opción.
"No me compadezcan, soy una médica, una combatiente, soy ucraniana y cumplo con mi deber", sostenía. Un mensaje así le escribió a una amiga por chat pocos días antes de morir.